Aunque parece una historia propia de un cuento de hadas, una sorprendente lluvia de chocolate comenzó a caer del cielo en una ciudad suiza gracias al fallo del sistema de ventilación de una fábrica.
La empresa Lindt & Spruengli confirmó este martes los informes locales sobre un defecto menor en la ventilación de refrigeración de una línea de «semillas de cacao» tostadas en su fábrica de Olten, entre Zúrich y Basilea.
Los ojos de la población miraban anonadados esta precipitación formada por el cacao en polvo fino combinado con los fuertes vientos del viernes pasado por la mañana, ha informado Associated Press.
Al extenderse el polvo alrededor de la fábrica, se obtuvo como resultado una capa fina de cacao en el suelo e incluso encima de los automóviles aparcados cerca de las inmediaciones.
La compañía se ha ofrecido a pagar por la limpieza necesaria, pero aún no ha aceptado la oferta. La producción de la fábrica pudo continuar con normalidad ya que las partículas eran completamente inofensivas.