Cuando eran pequeñas, Denise y su hermana gemela desaparecieron en un mercado de Seúl (Corea del Sur) al que habían ido con su abuela. Su hermana, Sang-Hee apareció dos días después, pero con Denise, cuyo nombre de nacimiento era Sang-Ae, no hubo la misma suerte.
Con motivo de su desaparición, Denise fue llevada a un orfanato ubicado a dos horas de distancia del mercado. En Nochebuena de 1976 fue adoptada por una pareja estadounidense a la que le habían dicho que la niña fue abandonada en la puerta de un hospital puesto que estaba enferma.
Tal como contó el portal de noticias Korea Now, durante un viaje a Corea del Sur en 2016, Denise se inscribió en un programa de ADN que rastrea a las familias de los adoptados estadounidenses y, finalmente, gracias a ello Denise ha podido encontrar a su familia biológica.
La madre biológica de Denise también se había registrado en el mismo programa de ADN hacía exactamente un año y, a principios del mes de octubre, se realizó una prueba de compatibilidad.
El 14 de octubre, 43 años después de su desaparición, Denise pudo hablar con su familia biológica a través de una videoconferencia. En la llamada también estaba su hermana gemela, de la que Denise no había tenido constancia hasta ese momento.
La familia de la mujer nunca perdió la esperanza de encontrarla. Incluso habían abierto una tienda en el mercado donde Denise desapareció con la esperanza de que, algún día, pasara por allí y la volviesen a ver.
«Nunca te abandonamos, Sang-Ae. Te buscábamos todos los días», le dijo a Denise su hermana gemela. La mujer estaba encantada con la enorme cantidad de similitudes entre las dos hermanas. Su parecido iba más allá de la apariencia, incluso los gestos, los gustos por la comida y los colores y la pasión por viajar eran comunes entre ambas.
La madre biológica de Denise le contó que aún guardaba algunos panfletos que colgó por la ciudad cuando buscaban a su hija. Por desgracia, la abuela y el padre de Denise fallecieron antes del reencuentro. El padre de la joven tuvo problemas con la bebida justo después de que ella desapareciera y, finalmente, falleció de una enfermedad hepática hace veinte años.
Sin embargo, Denise explica que pudo sentir cómo tanto su padre como su abuela estaban presentes en el reencuentro. En el futuro, Denise tiene la intención de pasar el resto de su vida junto a su familia biológica y, además, planea presentarles a sus padres adoptivos.