Según los rumores, la empresa del cofundador de Google, Sergei Brin, llamada LTA (Lighter Than Air) está finalizando su primera aeronave de próxima generación bajo el nombre de "Pathfinder 1".
Esta versión no será la más grande ni la más ostentosa, sino que será solamente el prototipo de prueba para comprobar algunas tecnologías que se están desarrollando en secreto.
El prototipo Pathfinder 1 no se queda atrás en lo que a dimensiones se refiere: este tendrá una longitud aproximada de 72 metros, usará baterías convencionales y 12 motores eléctricos para llevar a 14 pasajeros. Sin embargo, esta versión parecerá una simple maqueta del gran proyecto que se esconde tras bambalinas en la empresa de Brin, cuyo objetivo es crear la máquina voladora más grande del mundo, con una longitud de 198 metros -más del doble que el Antonov An-225 Mriya, considerado el avión más grande del mundo con 84 metros; y más grande que el dirigible HAV Airlander 10 de 92 metros-.
Además de este colosal tamaño, LTA quiere que su aeronave cuente con el generador eléctrico volante más potente jamás creado: una pila de hidrógeno capaz de proporcionar 1,5 megavatios de energía. Para poder hacer una comparación de las grandes ambiciones de Brin, en estos momentos la pila más grande de este tipo solo genera 0,25 megavatios. El objetivo de tener algo así es poder volar distancias gigantes con grandes cargas desde su base.
No se sabe mucho más sobre el diseño y el resto de características técnicas que tendrán las aeronaves de LTA, por lo que son un secreto muy guardado. De momento conocemos algunas piezas y la misión de estos gigantes voladores. Solo sabemos que la misión de Brin es llevar ayuda a zonas afectadas por desastres humanitarios a un coste muy reducido. LTA se encargará de proporcionar ayuda global a la fundación de Brin especializada en este tipo de desastres "Global Support and Development" (GSD).
También se conoce que estos dirigibles no serán como el Hindenburg, conocida como la mayor aeronave construida hasta la fecha y que terminó con la vida de 36 personas el 6 de mayo de 1937 tras prenderse fuego sobre los campos de Manchester Township en Nueva Jersey. Para que esta tragedia no ocurriese, desde hace muchos años se emplea el helio en lugar de hidrógeno, cuyo escape provocó la explosión del Hidenburg.
El propio Elon Musk dice que con la tecnología de baterías actuales es imposible hacer que un avión eléctrico de pasajeros o carga sea práctico. Una de las soluciones que se presenta es el uso de pilas de hidrógeno. A su vez, la Unión Europea y Airbus están investigando esta tecnología para reemplazar la propulsión basada en el petróleo. El principal competidor del Pathfinder 1 es Boeing, aunque afirman que probablemente no tengamos aviones de hidrógeno hasta el año 2050, lo que supone el fracaso de LTA.
De no ser así, el éxito de esta empresa cambiaria el paradigma de los viajes aéreos sin duda alguna. Ya me puedo imaginar cómo será ver un dirigible de esas dimensiones volando por el cielo de aquí a una década como mínimo.