Viajar en avión con una maleta en cabina puede resultar ser muy engorroso, a pesar de la ventaja de no tener que pasar por la cinta de recogida de equipaje antes de salir del aeropuerto de destino. Y es que las normas de los aeropuertos son muy estrictas en cuanto a los materiales que se transportan en el equipaje, sobretodo cuando la mochila o maleta con la que viaje el pasajero va consigo hasta el avión.
Actualmente, todos los líquidos deben llevarse en un envase que no supere los 100 mililitros de capacidad, y estos deben estar empaquetados en una bolsa de plástico transparente con sistema de cierre. Estas bolsas deben sacarse de la valija y depositarse en una bandeja a parte del resto de cosas que se transporten para pasar el escáner. En unos meses este sistema podría cambiar.
Según ha informado 20 minutos, desde Aena ya han confirmado que «partir de 2024 los pasajeros que deseen llevar productos líquidos —geles, pasta de dientes, perfumes o aerosoles— no tendrán que sacarlos de sus equipajes para pasarlos por ningún escáner». Esto se debe a la implementación de unos nuevos aparatos con tecnología rayos X y 3D que permitirían ver todo lo que hay en el equipaje del pasajero «sin necesidad de sacarlo de la maleta antes de embarcar».
Por el momento, estos escáneres ya se han testado en algunos aeropuertos de Estados Unidos, y en España se llevarán a cabo las primeras pruebas en los aeropuertos de Barajas de Madrid y El Prat de Barcelona.
Por otro lado, aún no está claro si la normativa sobre la cantidad de líquido que se puede transportar cambiaría, ya que esta tecnología puede identificar la naturaleza de los materiales.