Interactuamos en redes sociales, compramos en tiendas en línea, aprendemos en blogs y en sitios especializados, nos informamos en periódicos digitales, leemos, miramos, escuchamos, imaginamos y emprendemos; buena parte de nuestras vidas sucede en internet, y de igual manera que no queremos a una persona espiando la privacidad de nuestros hogares, es importante aprender a proteger tu privacidad en línea.
¿Por qué es importante proteger tu privacidad en línea? No se trata únicamente mantener tu vida personal privada, sino que tu privacidad está íntimamente relacionada con tu seguridad: ganando acceso a tus datos personales, un hacker puede utilizarlos para cometer fraudes y estafas, pedir una recompensa a cambio de no divulgarlos, ganar acceso a tus cuentas personales y bancarias, etc.
Lo positivo, en todo caso, es que es muy fácil proteger tu privacidad en línea, ni siquiera es necesario que sepas contestar a la pregunta cuál es mi IP?; en principio, alcanzará con que te asegures de seguir estos simples consejos:
Abandona las contraseñas simples
¿Cómo te imaginas que un hacker «adivina» una contraseña? Si piensas que lo hace manualmente, estás equivocado. En realidad, los ciberdelincuentes utilizan software automatizado para probar cantidades astronómicas de combinaciones hasta dar con una contraseña en particular. Así, un sistema puede descifrar una contraseña compuesta únicamente por números en unos pocos segundos (o unos minutos a lo mucho); sin embargo, una contraseña compuesta por letras mayúsculas y minúsculas, números y símbolos, es prácticamente imposible de descifrar.
Desconfía de las conexiones abiertas
Procura desconfiar de las conexiones públicas, como las disponibles en bares, hoteles y aeropuertos, por ejemplo. Estas redes, por lo general abiertas, son mucho más inseguras que las redes privadas y mucho más susceptibles de sufrir intrusiones forzadas. Evita utilizar aplicaciones o plataformas web bancarias, así como iniciar sesión en tus cuentas de correo electrónico y de redes sociales, mientras estás conectado a una red pública. También ten cuidado de no compartir información valiosa o sensible mientras estás conectado a una de estas redes.
Ten cuidado con el phishing
El phishing es un tipo de estafa de internet en la que una persona se hace pasar por otra, o por una organización (un banco, por ejemplo), con el objetivo de engañar a la víctima y hacer que comparta información sensible voluntariamente.
Sucede comúnmente a través de correos electrónicos, por lo que una de las maneras más fáciles de descifrar si un correo es un intento de phishing es controlar que la dirección del remitente sea una oficialmente reconocida por la entidad que supuestamente representa. Otra manera es contactar directamente a la persona o la organización que supuestamente te ha contactado a ti, para verificar que el correo no sea fraudulento.
Utiliza una VPN
No hace falta que sepas cuál es tu IP, pero si utilizas un software de VPN, nadie lo sabrá. En la práctica, utilizar una VPN es una de las maneras más efectivas de proteger tu privacidad en línea, ya que oculta tu dirección de IP y añade una capa de encriptación a los datos que se transmiten entre tus dispositivos e internet.
Por lo demás, es cuestión de ser consciente de los datos y la información que compartes en internet. Tu privacidad es importante, tanto por el hecho de mantener una vida privada saludable, como por tu propia seguridad, y la de las personas con las que interactúas en línea día a día.