Carla Maronda es una mujer valenciana de 25 años a la que le ha cambiado la vida de un día para otro. A esta joven le han tenido que amputar las manos y las piernas por culpa de una bacteria.
Esta valenciana acudió en marzo al hospital para que le quitaran un bulto que le había salido en la ingle y estaba "muy pegado al hueso". La intervención fue un éxito, y además ese mismo día acudió a concierto en compañía de su novio y amigos.
Tiempo después comenzó a sentirse peor y fue al centro médico donde le derivaron al Hospital de Xátiva con "diarrea y vómitos". "Me sondaron, me pusieron gafas nasales, me picaban los ojos y me dijeron que tenía un virus", cuenta en un vídeo en redes sociales.
Lo cierto es que su problema era una agresiva bacteria que infectaba todo su cuerpo y le ocasionó hasta cuatro paradas cardiácas. Tras pasar 12 días en coma inducido, Carla Maronda despertó sin poder moverse. La combinación de la bacteria con los medicamentos para combatirla le habían producido necrosis en las extremidades.