Las peleas de gladiadores han dejado de ser cosa del pasado. Un nuevo deporte trae de vuelta los espectaculares combates de los coliseos romanos y de las justas medievales, y lo hace a lo grande.
Armored MMA (AMMA), una novedosa modalidad de lucha en ring, dota a sus luchadores de las mejores armaduras y armas del medievo. Con cascos de todo tipo, desde yelmos hasta bacinetes, y enorme cantidad de espadas, hachas y alabardas, este espectacular deporte se ha convertido en la estrella del foco mediático en los últimos días.
Eso sí, pese a las armaduras completas que portan los participantes, estos enfrentamientos terminan con multitud de heridas y lesiones. Solo hace falta echarle un vistazo a la página web oficial para leer su lema, «quién quiere violencia», y saber que aquí no se andan con chiquitas.
El gran éxito de este deporte, además de la brutalidad y el espectáculo que conlleva ver a dos personas (hombres y mujeres) hartarse a dar y recibir golpes a lo burro, se debe al alto grado de profesionalidad que hay. Los combates se retransmitan por diferentes plataformas, se publican en YouTube con el audio e imagen de los comentaristas y se celebran en recintos a rebosar de público. De hecho, el deporte ya cuenta con una clasificación según peso, armamento o si se es aficionado o curtido en el combate.
El 16 de noviembre se celebra un gran torneo en Nashville que incluirá 12 combates entre los mejores luchadores del mundo. Destaca leer que se trata de un evento para todas las edades, si bien se recomienda tener más de tres años. El precio va desde los 40 dólares de la grada a los 150 de la zona VIP, cuyas entradas se encuentran agotadas.
En realidad, los combates medievales modernos llevan años librándose en diferentes zonas del mundo, con especial presencia en la Europa oriental. Ahí llegan a librar auténticas batallas entre naciones con más de 20 integrantes por equipo.
De hecho, en España se celebró el Mundial de Combate Medieval 2023 en el Castillo de Belmonte.