Todo indica que los empresarios turísticos tienen muchos problemas para contratar personal, entiendo que cualificado, por las escasez de viviendas. Y admite el presidente de la Fehif, Juanjo Riera, que si el problema no es mayor es debido a que hay muchos hoteles que tienen habitaciones de personal y que, además, les dan manutención. Por otra parte, Lucas Prats, presidente del Fomento de Turismo, ha manifestado que históricamente muchos hoteles tenían alojamientos para personal. Entonces, a mi entender, la solución pasa por disponer o construir alojamientos para el personal que viene de fuera y que no puede pagar alquileres elevados. Entonces, la cuestión podría reconducirse si en cada municipio se construyeran, por parte de las patronales, residencias para su personal. Algo parecido a lo que han hecho en el hospital Can Misses, que habilitará 11 habitaciones para alojar personal sanitario.
Opina el conseller Miquel Vericad que el problema de las basuras tiene dos soluciones: construir un nuevo vertedero alternativo al de Ca na Putxa (tema muy problemático) o exportar los residuos generados en las Pitiusas, pero que en Mallorca no los quieren. Pienso, ya que aún soy libre de hacerlo, que se debería estudiar la posibilidad de instalar en Eivissa una planta incineradora para eliminar buena parte de nuestras basuras. Lo digo porque a dicho estudio inicial pueden hacerlo funcionarios del Consell Insular y del Govern balear, de manera que no nos cueste un euro. Me consta que hoy en día ya se construyen crematorios muy poco contaminantes y ahora se podría estudiar el coste, para tener una idea de la viabilidad de la propuesta.
Y una buena noticia es que debido a las recientes lluvias los acuíferos de Eivissa están en un 76 por ciento de su capacidad, que viene a ser una bendición para nuestra escasa geografía. En cambio, aún hay problemas con la puesta en marcha de la desaladora de Santa Eulària cuyos caudales han de ayudar a apagar la sed de muchos vecinos del término municipal de Santa Eulària y el de Sant Josep. La verdad es que no entiendo tanta burocracia borbónica ni tampoco el hecho de que nuestra autonomía esté tan desnaturalizada y excesivamente controlada por el Gobierno central.
En cuanto a la ecotasa, al igual que sucede en otros importantes estados europeos, lo correcto sería que la recaudación ingresara en las arcas de los ayuntamiento para así poder invertir en medio ambiente, mejorar los centros urbanos y eliminar de una vez todas los basureros clandestinos que pueblan nuestros campos y bosques. Y es muy fácil que así sea si nuestros partidos políticos con representación en el Parlament lo exigen. Y punto.