Sant Antoni, el municipio turístico por excelencia, ha dejado de la mano este gran sector, sin prestarle la atención e importancia que se merece, pues absolutamente «todos» vivimos de él. Desde la candidatura que encabezo de EPIC, no apoyaremos mas masificación y crecimiento descontrolado, pero tampoco cerraremos las puertas ni pondremos obstáculos a lo que se pueda hacer de forma ordenada y sostenible. Y por supuesto, lo que está hecho se defenderá para que pueda estar en perfectas condiciones para nuestros visitantes. A los que dicen crecimiento cero, solo les puedo decir que es irreal y que son unos ilusos, además de ilegal, pues actualmente hay un crecimiento aprobado en donde debes de conceder licencia, siempre y cuando esté dentro de la legalidad. Proponemos crear un patronato y contratar un gerente.
Nuestra segunda preocupación es el urbanismo, o mejor dicho, resolver el gran caos que hay en esta área (fue responsabilidad de Juanjo Ferrer del PI (PxE) y mas tarde de la actual socialista Cristina Ribas). Con, en algunos casos, más de dos años de retraso para emitir informes, para pequeñas reformas o bien para nuevas construcciones. Además de muchos inconvenientes, lo que esto produce es ralentizar la economía y no colaborar con la gente que está en paro. Ni Ley Montoro, ni ocho cuartos ¡Sí o sí, se tienen que desatascar estos temas atrasados. ¿Cómo? Contratando a más técnicos, contratando a una empresa de arquitectura o de cualquier otra forma que represente la solución a este grave problema. De una vez por todas también se tiene que actualizar el PGOU de los 80, lo que lleva tiempo (tal vez más de una legislatura).
Otro puntos fuerte: promover y promocionar al máximo el comercio local, a la pequeña y mediana empresa no solo hay que ayudarla mucho más. También hay que apoyarla, atenderla (hicieron alegaciones que no se tuvieron en cuenta a una ordenanza que mas tarde tuvieron que aceptar). Señores del Ayuntamiento, no vale con una feria de stocks, unos vales de compras y poco más. Hay que mimarlos y tenerlos en cuenta, pues el pueblo se muere y todo son grandes superficies.
En orden público hay que estabilizar la situación. Ni antes estaba bien, ni ahora se tienen que pasar de frenada y exportar el problema de borrachera a otras zonas del municipio. Cierto que hace falta más Policía Local y también que se debe ser mas efectivo con la prostitución, venta ambulante ilegal, droga, robos y mal comportamiento cívico. A pesar de las leyes nacionales que muchas veces dificultan la labor de la autoridad, no se puede permitir que un solo bar tenga más de 70 denuncias varias resultantes de su actividad. Aquí falla el propietario o los políticos.
Nunca se debe permitir la suciedad que hay, más aun si somos punteros en turismo. Son los turistas de un nivel muy bajo los que ensucian, pero también hay algunos residentes que no están a la altura. Esto se arregla con bandos, información, avisos y multas y más multas.
Cuadruplicar las ayudas al campo, las parroquias, en definitiva las zonas rurales del municipio.
Y tal vez lo más importante: hace falta una nueva actitud para con nuestros ciudadanos. Los políticos con responsabilidad y también algunos funcionarios debemos de ser mas receptivos.
Exigir participación, transparencia y fiscalizar. No entraremos en equipo de gobierno alguno. A mí modo de ver a Sant Antoni le falta mucho trabajo, sentido común, quitarse de tonterías y partidismos y apoyar todo lo que sea bueno para nuestro municipio, venga de quien venga.