Joan Ribas se presentó ayer al pleno de Vila con un lazo amarillo, que reivindica la salida de la prisión de los políticos catalanes que promovieron el referéndum ilegal.
El Ayuntamiento de Vila instalará un cronómetro para controlar los tiempos en los plenos.
A pesar de que la moción sobre los anuncios de sexo no cambia nada, Antoni Villalonga se mostraba satisfecho.