La ciudad de Eivissa vivió este viernes una de sus noches más concurridas del año con motivo del castillo de fuegos artificiales que cerró la jornada festiva del Vuit d’Agost, día de Sant Ciríac, patrón de la ciudad. El espectáculo pirotécnico, que puso el broche final a los actos principales de las Festes de la Terra, volvió a atraer a miles de personas que se repartieron por distintos puntos estratégicos para seguir el evento con la mejor perspectiva posible.
El dique de abrigo del puerto de Ibiza fue, como es habitual, el lugar de lanzamiento de los fuegos, que este año contaron con 400 kilos de pólvora. La duración del castillo se prolongó durante más de quince minutos y ofreció una secuencia de explosiones sincronizadas visibles desde amplias zonas del frente marítimo de la ciudad.
Muchos vecinos y visitantes se concentraron en el propio paseo del puerto, donde el tránsito fue limitado para facilitar el acceso a pie. También se llenaron de público zonas elevadas como Dalt Vila, así como los alrededores de Vara de Rey y los barrios más cercanos al centro. No obstante, uno de los espacios más frecuentados volvió a ser el paseo marítimo y es Botafoc, desde donde centenares de personas siguieron el desarrollo del espectáculo en grupos o en familia, algunos desde embarcaciones atracadas o fondeadas en la bahía.
Las Festes de la Terra, reconocidas como Fiesta de Interés Cultural desde 2007, continuarán durante los próximos días con propuestas culturales y festivas dirigidas a distintos públicos, aunque el Vuit d’Agost sigue siendo la jornada central y más significativa del programa.
Ibicenco adaptadoY tú qué narices sabes si está o no denunciado? Payaso ignorante.