Es Cubells ha celebrado este miércoles su día grande de las fiestas de Santa Teresa. A medida que se acercaba la tarde, vecinos y algunos turistas se fueron reuniendo frente a la iglesia. Ya se notaba la entrada del otoño con el aire fresco, y las chaquetas y los pantalones largos empezaban a reemplazar los vestidos y trajes vaporosos que se veían en verano. Las farolas de la calle empezaron a encenderse mientras algunos turistas cenaban tranquilamente en la terraza del restaurantes de al lado.
A las 19 horas dio inicio la misa solemne, oficiada por el obispo de Ibiza, Vicent Ribas. La iglesia se llenó de feligreses y visitantes, que siguieron la ceremonia con atención mientras la luz del atardecer iluminaba las paredes blancas del templo. «Es una alegría poder celebrar las fiestas, pensábamos que con las lluvias quizás se cancelaban», señaló Marina, vecina de la localidad, mientras observaba a familiares y amigos saludarse y conversar antes de la procesión.
Tras la misa, la procesión salió a hacer su recorrido habitual, con los vecinos acompañando la imagen de Santa Teresa.
Terminada la procesión, la plaza se llenó de movimiento. Allí tuvo lugar el ball pagès, a cargo del Grup Folklòric Sa Colla des Vedrà de Sant Josep. Los trajes tradicionales de los balladors y balladores llamaban la atención con sus faldas que se movían con cada giro, chalecos bordados y camisas blancas, mientras la Colla hacía sonar las flautas y repicar las castanyoles. A su alrededor el corro de personas les miraban con atención y emoción. También se repartieron bunyols, como cada año.
Las fiestas continúan en los días siguientes. Este jueves se rinde homenaje a las personas mayores del municipio con un almuerzo, mientras que el sábado se celebra una festa pagesa en la Font d’en Xiquet, con juegos tradicionales, más ball pagès y la obra de teatro Viatge Regalat, a cargo del Grup de Teatre des Cubells.