La Assemblea de Docents de Formentera llevó a cabo ayer una primera jornada de huelga y en ella participó el 38 por ciento del profesorado de la menor de las Pitiüses, según la propia asamblea. Según el Govern balear, 25 profesores de 116 secundaron esta jornada de huelga, por lo que la participación llegó al 21,6 por ciento. Por centros educativos, el Instituto Marc Ferrer fue en el que más se notó la huelga y donde, a partir de las 10,00 de la mañana, los profesores mantuvieron reuniones asamblearias.
En el caso del único instituto de la isla, de 56 profesores, 15 desarrollaron servicios mínimos, dos estaban de baja y de los 39 que podían unirse a la huelga lo hicieron 18, por lo que esta fue apoyada por el 46 por ciento del profesorado.
En el Col·legi Mestre Lluis Andreu de Sant Francesc Xavier siete de 32 maestros optaron por servicios mínimos y cuatro por la huelga, por lo que el porcentaje de seguimiento se situó en un 16 por ciento, mientras que en Sant Ferrán este se tradujo en un 30 por ciento con siete profesores en servicios mínimos y tres de diez en huelga de los 17 educadores con los que cuenta en centro.
En la escuela unitaria de la Mola, de los tres maestros dos cubrieron los servicios mínimos y uno se adhirió a la jornada de paro.
Con respecto a la ausencia de alumnos en todos los centros educativos de la isla esta rozó el 40 por ciento.
A las 12,00 horas una veintena de profesores y algunos padres se concentraron en la Plaza de la Constitución en Sant Francesc Xavier, donde desplegaron varias pancartas y repartieron al público unas hojas informativas en las que detallaban el motivo de esta huelga,
Pacto social
Según una de las portavoces del colectivo, Emilia Badenes, «volvemos a insistir en un pacto social y político que sea fruto del consenso para conseguir la estabilidad del sistema educativo, independientemente de quien gobierne».
Los docentes de Formentera piden además una nueva regulación, dotada de recursos, en la enseñanza de las lenguas, así como aulas menos masificadas y consideran que el TIL «en el 80 por ciento de los centros no lo tienen aprobado» y en el caso de la LOMQE, «los padres pierden poder decisivo y se mercantiliza la educación».
Los educadores de la isla seguirán manteniendo reuniones entre ellos y con las APIMAS y no descartan «realizar distinto tipo de acciones reivindicativas e informativas durante el curso lectivo», concluyó la portavoz.