El conseller de Territorio, Energía y Movilidad del Govern, Joan Boned, se ha comprometido en Formentera a "trabajar de manera conjunta con vecinos y el Consell para resolver la problemática de la Central de Es Ca Marí".
Boned, junto al presidente Jaume Ferrer, ha visitado este lunes la instalación para conocer de primera mano la situación de esta infraestructura.
Asimismo, se ha entrevistado con los vecinos, afectados por los ruidos de la Central, y les ha asegurado que la Conselleria ya ha puesto en marcha algunas actuaciones de mejora.
Así, ha explicado que ya ha remitido una carta al Ministerio de Turismo, Industria y Energía, reclamando que se acelere la declaración de idoneidad para el cambio de la actual turbina por otra de gas, una actuación pendiente desde 2013.
Boned también ha dicho que ha realizado un requerimiento a Gesa para que se informe sobre la situación actual de las instalaciones y controles de emisiones que se llevan a cabo.
Asimismo, ha señalado que la solución al problema energético de Formentera pasa por la instalación de un tercer o cuarto cable eléctrico, cuyos trámites se ha comprometido a acelerar, y de las nuevas turbinas.
Hasta que estas medidas se puedan llevar a cabo, el conseller ha garantizado a los vecinos que se arbitrarán soluciones inmediatas, exigiendo a Gesa la adopción de medidas de aislamiento adecuadas, seguras y suficientes, que reduzcan los ruidos y las emisiones.
Asimismo, se instará a crear una única salida de humos, a mayor altura para evitar los problemas que sufren los vecinos de la Central.
El presidente Jaume Ferrer ha asegurado, por su parte, que "ahora más que nunca, Formentera pende de un hilo", refiriéndose a que uno de los cables de energía eléctrica entre Ibiza y Formentera se ha roto por el ancla de un barco.
Los responsables del Consell han trasladado su preocupación por la precaria situación de la Central, mientras que Boned ha reconocido que la solución no es fácil.
Punto de información del Ibavi