Con la misma austeridad que caracteriza los actos oficiales en los últimos años, ayer el Consell Insular de Formentera abrió sus puertas para celebrar el día de la Constitución, un acto en el que participaron el presidente, Jaume Ferrer, acompañado de siete de los nueve consellers del equipo de gobierno de Gent per Formentera, así como representantes de los partidos en la oposición, PP, PSOE y Compromís.
El acto comenzó con la lectura de diferentes artículos de la Carta Magna por parte de representantes de diferentes colectivos de la isla. El discurso institucional del presidente Ferrer estuvo marcado por dos líneas claras. Por un lado la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el deslinde de Costas de la isla y por otro la necesidad de una reforma de la Constitución.
«La Carta Magna cumple 37 años y este aniversario concuerda con el período electoral de las elecciones generales previstas para el próximo día 20 de diciembre lo que constituye una coincidencia agradable y oportuna», manifestó Ferrer.
Jaume Ferrer hizo referencia a «dos evidencias muy importantes». La primera de ellas relativa, «a la contundente sentencia del Tribunal Constitucional que anula una gran parte de la disposición adicional cuarta de la Ley de Costas y que ha protagonizado la ultima parte de este año político».
En este sentido, el presidente Ferrer apuntó que «acatamos completamente esta sentencia y es lamentable el mal trabajo del Gobierno central a la hora de defender una causa que desde aquí estaba clarísima». Añadió que, «de la misma manera que no toleramos un paso atrás en la defensa del litoral, tampoco nos faltarán fuerzas para trabajar en la recuperación de las propiedades por parte de los afectados».
En relación a una futura reforma de la Constitución, Jaume Ferrer, expresó que «en estos momentos la reforma de la Constitución se presenta como un hecho factible ya que la mayoría de las fuerzas políticas que se presentan a las próximas elecciones generales lo contemplan en sus programas electorales, excepto el Partido Popular». Como no podía ser de otra manera, desde el Consell Insular de Formentera se volvió a reivindicar una propuesta ya «histórica»; la figura de un senador propio para la isla. Para Ferrer, «la reforma de la Constitución podría ser la gran ocasión para poner fin a esta petición» y recordó que Formentera cuenta con el reconocimiento institucional en el ámbito Balear pero no en los estamentos estatales.
Para la portavoz del PP de Formentera, Gabriela Mayans, «este es un día para celebrar la Constitución y coincidimos en la reivindicación de que Formentera cuente con un representante en el Senado y, con respecto al deslinde, queremos seguir trabajando en la protección del litoral y en el respeto a la propiedad privada». Unas posturas con las que coincidió el conseller del PSOE, Rafa Ramírez, quien añadió que, «la Constitución nos ha permitido tener un espacio de libertad a todos los españoles».