El proyecto de una nueva compañía denominada IslaAir para operar vuelos regulares entre las Islas Balears y más adelante también con la península, mediante hidroaviones no ha despertado mucho interés en las Pitiusas.
Tanto el Consell de Ibiza, como el de Formentera se encuentran aún a la espera de que la propuesta les llegue de forma oficial, ya que hasta el momento solo saben de la iniciativa a través de los medios.
No obstante, el Consell de Formentera se muestra contrario a esta actividad. El conseller de Movilidad e Infraestructuras de la Pitiusa menor, Rafael González, señalaba ayer a Periódico de Ibiza que se oponen a la conexión directa de hidroaviones en la isla «porque el 100% del litoral está protegido por diferentes figuras medioambientales y este tipo de proyectos son contrarios a la idea de preservación de Formentera» que defienden desde el Consell. Algo que también recalcó la consellera de Territorio y Turismo, Alejandra Ferrer, en su cuenta de Twitter «Gent per Formentera tiene claro que este tipo de proyectos no tienen ninguna cabida en Formentera ya que son contrarios al modelo de isla natural y singular», escribió.
El Consell de Ibiza señaló que no hará ninguna valoración hasta que la empresa no les haga llegar el proyecto y conozcan los detalles.
La idea de IslaAir, es operar en una primera fase rutas regulares entre el puerto de Palma y los de Ibiza, Maón y la Savina. También contempla una ruta entre Ibiza y Formentera. En una segunda fase su propuesta es unir además las islas con la península.
En total 12 conexiones diarias con las que la compañía advierte, se mejoran las conexiones aéreas con una reducción del coste y del tiempo, ya que operarán desde los puertos, es decir, «cerca del centro de la ciudad».
La compañía señalaba que para operar desde los puertos solo necesitan un espacio en el muelle en el que instalar una pasarela para que los hidroaviones atraquen y efectúen el embarque y el desembarque de pasajeros.
Desde la Autoridad Portuaria de Baleares (APB) por su parte señalaron que es algo que se tiene que estudiar. «La petición tiene que ser compatible con la situación actual de explotación del puerto y no es fácil atender peticiones de este tipo en puertos tan saturados como el de Palma e Ibiza», explicaban fuentes de la APB.