El conseller d'Educació del Govern balear, Martí March, anunció ayer a la dirección del colegio de Sant Ferran y a la APIMA del centro que el inicio de la construcción del nuevo CEIP y de la escuela de Educación Infantil es «inminente». Tras la movilización lograda en una manifestación el pasado mes de diciembre, donde mostraron su malestar por estar «cansados de esperar», la comunidad educativa de Sant Ferran comienza a ver resultados.
Tal y como explicó el director general de Planificación, Ordenación y Centros, Antoni Morante, este mismo miércoles tendrá lugar la firma del contrato de adjudicación de las obras y su intención es que las labores «se inicien dentro del mes de mayo o como mucho a principios del mes de junio».
Los trabajos de construcción continuarán todo el verano tras la solicitud del Instituto Balear de Infraestructuras y Servicios Educativos (Ibisec) de una moratoria al Consell Insular para poder ejecutar las obras durante el periodo estival. Con todo ello, la previsión del Govern es que «para julio del año que viene la obra esté acabada o a punto de acabar» y que «el curso 2020-2021 el CEIP de Sant Ferran sea una realidad pese a todas las dificultades», según declaró March.
La infraestructura tendrá un coste total de 6,9 millones de euros, financiados conjuntamente entre el Govern balear y el Consell de Formentera. Concretamente, la conselleria d'Educació del GOIB invertirá 5.810.100 euros en el centro de Educación Infantil y Primaria; por su parte, el organismo insular costeará la escuela de cero a tres años con 1.090.345 euros de inversión. Una UTE formada por Hermanos Parrot y Tecopsa será la encargada de la construcción.
Formación Profesional
Paralelamente, Formentera cuenta desde ayer con una mesa de negociación con el fin de progresar en la implantación de nuevos ciclos formativos en la isla y mejorar las condiciones de sus estudiantes. Este grupo de trabajo, más allá de contar con la participación institucional, también integrará agentes sociales y económicos de la isla, así como miembros de la comunidad educativa del IES Marc Ferrer para definir el futuro de la Formación Profesional.
En este sentido, el conseller Martí March destacó la necesidad de mantener «un diálogo constante y permanente para ver qué tipo de ciclos formativos se pueden poner en práctica y poder diseñar un planteamiento no solo a corto plazo, sino también a medio y largo plazo».
De este modo, el objetivo principal de la mesa es consolidar la FP como una importante vía educativa «que dé respuesta a las necesidades sociales y del sistema productivo», tanto en Formentera, como el conjunto de las islas.
En el caso de la menor de las Pitiusas, esta iniciativa también será clave en el futuro de los estudiantes que tengan que salir de la isla para formarse. La consellera de Educación de Formentera, Susana Labrador, mostró su satisfacción tras la constitución de este «espacio de diálogo» que satisface «una petición histórica, que es que hayan más ciclos formativos en Formentera y también mejorar las situaciones de los estudiantes que hayan de viajar fuera para estudiar».
Eso sí, será ya a partir de septiembre cuando se celebre la primera reunión formal de trabajo. La coyuntura actual, con unas elecciones autonómicas y municipales a la vuelta de la esquina, según el Gobierno y el Consell, pide «prudencia». Sin embargo, independientemente de los resultados, ambas instituciones han asegurado que esta mesa de negociación «ha nacido para continuar».