El Consell de Formentera retrasa la ordenanza de ruidos que prohíbe la realización de obras que puedan ocasionar molestias en núcleos urbanos y turísticos al próximo 15 de mayo. Habitualmente, esta ordenanza está en vigor entre el 1 de mayo y el 15 de octubre, según recordaron ayer desde el Consell de Formentera.
«Este año la hemos pospuesto 15 días ya que el inicio de la temporada turística también se ha pospuesto y así permitimos que se continúe fomentando la economía local y que se puedan acabar ciertas obras que también, a causa de la crisis originada por el coronavirus, hayan podido sufrir retrasos», expresó Rafael González, conseller de Territorio de la pitiusa sur.
Cabe recordar que cada temporada en los núcleos urbanos o zonas turísticas sólo se pueden ejecutar las obras que no ocasionen molestias tales como ruidos y vibraciones, que normalmente son producidas por excavaciones y construcciones de cimientos y estructuras.
Por otra parte es preciso señalar que sí que estará permitido hacer obras menores o interiores que no ocasionen molestias a los vecinos y otras motivadas por la reparación de averías en las conducciones existentes que deben ser solucionadas por motivos de seguridad y/o salubridad o bien obras urgentes que no admitan dilación.