La Conselleria balear de Movilidad indicó ayer que el Proyecto de decreto que regulará el transporte marítimo entre Ibiza y Formentera avanza hacia su tramitación y se ha solicitado ya dictamen al Consell Económico y Social.
El proyecto, impulsado por la Conselleria a través de la Dirección General de Transporte Marítimo y Aéreo, ha sido sometido a dos trámites de información pública y en estos momentos se dispone ya de un nuevo texto que incorpora algunas de las alegaciones presentadas. Posteriormente, se pedirá dictamen al Consell Consultiu y, una vez se reciban los informes pertinentes, se remitirá el documento a la Comisión Europea.
A pesar de los avances en la tramitación, parece que finalmente el decreto del Govern no limitará el número de frecuencias máximas en la línea marítima entre Ibiza y Formentera y tampoco flexibilizará las excursiones de un solo día entre las Pitiusas. Según informó ayer Radio Ibiza Ser, prácticamente todas las alegaciones de los Consells de Ibiza y Formentera han sido rechazadas.
Según esta misma información, el conseller de Movilidad, Josep Marí Ribas Agustinet, habría manifestado que no pueden poner un tope de frecuencias en la ruta entre las Pitiusas en un mercado europeo liberalizado. También señaló que ya se habrían reducido en un 30% los servicios diarios con la medida impuesta por Autoridad Portuaria de limitar los atraques simultáneos.
Preguntados los Consells pitiusos por estas declaraciones, desde Formentera declinaron realizar valoraciones al no tener todavía información directa del Ejecutivo balear.
Desde el Consell de Ibiza, el vicepresidente segundo Javier Torres lamentó que «el Govern haya comprado el discurso de que las empresas de excursiones marítimas son las causantes o las culpables de los problemas de saturación que pueda haber en la isla de Formentera y, concretamente, en el puerto».
Torres recordó que la mayoría de estas empresas son «pequeñas y familiares»y no suponen más del 10% en el cómputo global de los pasajeros que viajan entres las Pitiusas, manteniendo frecuencias muy reducidas. En relación al decreto, el vicepresidente recordó que presentaron una alegación en ese sentido pidiendo que «se flexibilizasen los criterios para poder operar y hacer esas excursiones marítimas, aunque estamos a favor de diferenciarlas del transporte regular».
Para Torres, podrían impulsarse otras medidas, además de «simplemente prohibir» o establecer limitaciones que pueden llevar al cierre a muchas de estas empresas.
El vicepresidente lamentó el «desamparo que provoca el Govern con el anuncio de que no tendrá en cuenta alegaciones en este sentido». Por ello, confió en que finalmente se pueda llegar a un acuerdo ya que, en caso contrario, la noticia supondría la constatación de «algo que puede ser muy perjudicial para un colectivo que no es el causante de los problemas que puedan existir».
«La disminución de las excursiones marítimas no hará que vaya menos gente a Formentera. La gente irá de todas formas», insistió Torres, quien consideró que podrá provocarse ahora «un problema de saturación adicional en el puerto de Ibiza».
«Nadie sale ganando. Se ven perjudicadas las empresas y los usuarios y el puerto de Ibiza estará todavía más saturado», concluyó.
Sobre las excursiones marítimas, Agustinet explicó que, en la valoración de las alegaciones, no han tenido en cuenta la petición del Consell de Ibiza de flexibilizar estos trayectos turísticos de un día entre las Pitiusas. Así, las excursiones deberán durar un mínimo de cuatro horas y un máximo de doce y durante ese tiempo no se podrá organizar otro servicio ni volver al puerto de origen.
Alegaciones
En las distintas alegaciones presentadas por los Consells, desde Formentera solicitaron que el decreto que desarrolla el régimen especial de prestación de transportes marítimos incluya franjas horarias sobre los servicios mínimos en la línea regular, con especial atención a los de primera y última hora del día.
También se exigió evitar solapar o que haya un exceso de trayectos simultáneos en temporada estival en la línea regular Formentera-Ibiza. Sobre ello, el Consell solicitó que durante los dos primeros años de aplicación del decreto se realicen estudios de sostenibilidad medioambiental y que en el tercer año se apliquen las soluciones. En cuanto a las excursiones marítimas entre las Pitiusas, se reclamó que en ellas se garantice la accesibilidad universal, pudiendo permitir un periodo de adaptación.
Por su parte, el Consell de Ibiza solicitó en sus alegaciones la eliminación de uno de los artículos del decreto que establece que «durante el tiempo de duración de la excursión no se podrá destinar la embarcación a otras excursiones entre las dos islas».
Imagen de archivo de barcos circulando entre las Pitiusas.