El Consell de Formentera contará este año con una partida de un millón de euros para el cuidado de menores tutelados por la institución. Inicialmente, estaba previsto consignar 300.000 euros a este fin pero, entre las enmiendas negociadas por el presidente, Llorenç Córdoba, con el Govern balear se encuentra una que ha permitido que la comunidad autónoma destine finalmente un millón de euros para que el Consell formenterés pueda asumir la tutela de menores. El número de niños y adolescentes que han de ser tutelados por la institución insular ha ido en aumento en los últimos años debido, sobre todo, a la llegada de pateras a la isla.
Fuentes del Consell han explicado a Periódico de Ibiza y Formentera que, en estos momentos, se destina al cuidado de cada uno de estos menores entre 200 y 250 euros diarios. Todos ellos, sean formenterenses o sean de fuera de España, han de ser trasladados fuera de la menor de las Pitiusas porque el Consell carece de instalaciones para ellos. «Los destinos principales son Mallorca e Ibiza», han explicado las mismas fuentes de la institución, «pero, si allí no hay sitio, entonces hay que buscar en la Península. Estos traslados se pagan aparte y, además, el precio de los billetes es como el de un turista porque son chicos que no están empadronados en las Islas».
Normalmente, estos menores son trasladados a pisos tutelados en los que convive un máximo de ocho chavales. Con ello trabajan «entre dos y tres educadores sociales». Así, el dinero que destina el Consell a este cuidado «es prácticamente para el alojamiento, los educadores sociales y las comidas».
El Consell de Formentera, por otro lado, no otorga un trato diferenciado a los menores que proceden de fuera de la isla. «Son todos menores a los que hay que tutelar, vengan de donde vengan», han señalado desde la institución, «Formentera no se puede hacer cargo y les buscamos alojamiento primero dentro de Baleares y, si no hay, en la Península».
En la actualidad, el Consell de Formentera tutela a un total de 23 menores de entre 15 y 17 años. De estos, un total de 11 son chavales que llegaron a la isla a bordo de alguna de las pateras cada vez más habituales. Es esta situación la que ha llevado al Consell a reclamar al Govern más dinero para poder hacer frente a esta responsabilidad.