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El PSOE reclama menos agresividad para sentarse a hablar con Sa Unió

Los socialistas descartan que una moción de censura sea la solución

Ana Juan y Rafa Ramírez hablan durante el último pleno del Consell de Formentera. | Moisés Copa

| Ibiza |

El PSOE de Formentera mostró ayer su voluntad para solucionar la crisis institucional que vive el Consell y sentarse a hablar con Sa Unió «porque queremos ser la solución al problema». Sin embargo, consideran que una moción de censura «no es el instrumento adecuado en ese momento».

Los socialistas manifiestan estar «siempre dispuestos a llevar adelante las propuestas y proyectos que mejoren la vida de nuestros vecinos en el seno del Pleno de la Institución». El líder de los socialistas formenterenses, Rafa Ramírez, asegura que Sa Unió «no puede hacernos creer que la situación administrativa del Consell es insostenible, porque la legislación de la institución es garantista, la Junta de Gobierno está asegurada y los plenos se siguen celebrando con regularidad».

En este sentido, ha puesto de relieve que la crisis institucional actual es fruto de «diferencias personales entre miembros del equipo de gobierno y que no hay ninguna fractura ideológica ni política, porque lo demuestran votando en bloque las propuestas en las sesiones plenarias».

Los socialistas de Formentera defienden que «no es de recibo responsabilizar a la oposición ante un problema que ellos han creado, que no se han agotado todas las vías posibles para solucionar esta situación y que éstas pasan por el diálogo y los acuerdos entre los miembros del ejecutivo».

Dimisiones

Ramírez ha recordado que «deberían plantearse dimisiones para armonizar sus relaciones internas y quien no quiera forma parte de la solución que se marche a su casa».

Además, el secretario general de los socialistas de Formentera aconseja a Sa Unió que «si quieren diálogo y acuerdos con su partido, tendrán que reconducir su discurso», que califica de «agresivo y de desprecio a la gestión política en la pasada legislatura». En este sentido apunta que «no nos pueden echar piedras para después ofrecernos la mano».

Desde las filas socialistas reclaman «que el sentido común vuelva a la agenda política de Formentera, que empiecen a gobernar por los vecinos y que tomen las decisiones adecuadas para dar carpetazo a este sin sentido».

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