La crisis entre Sa Unió y Llorenç Córdoba ha sido de nuevo este martes tema de debate en el Parlament. Al igual que la semana pasada, el Govern ha vuelto a negar que haya abonado algún sobresueldo al diputado por Formentera, Llorenç Costa. El vicepresidente autonómico, Antoni Costa, ha sido tajante en este sentido: «Este gobierno no ha pagado ni pagará sobresueldos». El vicepresidente ha respondido así al PSIB, que ha vuelto a arremeter contra el Ejecutivo de Marga Prohens por esta cuestión.
Antoni Costa ha señalado, además, que los acuerdos que tiene el Govern con Llorenç Córdoba son «públicos». En este sentido, el vicepresidente ha destacado algunos de los puntos del acuerdo pactado con Córdoba al principio de la legislatura. Puntos como el relativo a la búsqueda de soluciones a la triple insularidad que sufre Formentera o al problema del tratamiento de las aguas residuales. Antoni Costa ha recordado, además, que el Govern se ha comprometido con el Consell de Formentera a desarrollar un plan de marketing específico para la isla y a elaborar un programa de inversiones en las diferentes zonas turísticas de la misma. El acuerdo contempla también que el Govern solicite al Gobierno central la apertura de delegaciones de servicios públicos estatales en Formentera y que actúe para «establecer un deslinde justo» rechazando las imposiciones del Ministerio de Transición Ecológica en este sentido.
«No quiere aceptar la realidad», le ha dicho el vicepresidente autonómico a la diputada socialista Pilar Costa. Esta, por su parte, ha vinculado el cierre de la Oficina Anticorrupción de Baleares con el caso de Llorenç Córdoba, quien solicitó el pago de un sobresueldo al Govern y al PP balear para poder mantener su trabajo como diputado. La socialista ha asegurado que la crisis abierta por este motivo entre Córdoba y Sa Unió, coalición de la que ha sido expulsado, ha tenido como consecuencia la paralización de la institución insular. Y ha intentado vincular a Antoni Costa con el escándalo de los sobresueldos al asegurar que este habría estado presente en la reunión que, en noviembre, mantuvo Llorenç Córdoba con la presidenta Prohens y con la secretaria general del PP en Baleares, Sandra Fernández.
Llorenç Córdoba, por su parte, ha solicitado la palabra en el debate para aclarar que, aunque el Consell de Formentera, «no funciona como debería», no está paralizado. Y ha exigido a los socialistas que no se refieran a él como corrupto. Palabras que han generado inquietud en la bancada del PSIB. A esta intervención, sin embargo, no ha podido responder Pilar Costa, tras la decisión del presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, de no permitir su intervención y entre comentarios de que la socialista ha sido «agredida».