Tanto Llorenç Córdoba como los ocho consellers de Sa Unió aceptaron ayer someterse al análisis de los integrantes de la comisión de seguimiento del Código Ético del Consell de Formentera. Una comisión que actualmente preside el cesado José Alcaraz y en la que participan como vocales Javier González Granado, Neus Costa y Lidia Serrano. El secretario de este organismo es Ángel Custodio Navarro. La propuesta la formuló el socialista Rafa Ramírez, durante la celebración del Pleno insular correspondiente al mes de marzo.
Ramírez aseguró que, ante la grave crisis que atraviesa el equipo de Gobierno y la imposibilidad de que lleguen a algún acuerdo, es necesario que se convoque de forma urgente esta comisión. Llorenç Córdoba, por su parte, ha asegurado que le parece «muy bien y correcto» poner la crisis en manos de la comisión de seguimiento del Código Ético.
El portavoz del PSOE en el Consell explicó que la oposición quiere que la crisis abierta por Córdoba a finales de noviembre de 2023 y que se ha agravado de forma notable en las últimas semanas «empiece a tener consecuencias». Y es que la comisión de seguimiento del Código Ético, ademas de analizar lo que está sucediendo, tendrá que emitir un dictamen al respecto. A día de hoy, según apuntó Ramírez en declaraciones a Periódico de Ibiza y Formentera, se desconoce si este informe será o no vinculante puesto que es la primera vez que se activa este mecanismo en el Consell formenterés y no hay nada legislado al respecto. «Esto nunca ha pasado», ha señalado el socialista tras la celebración del Pleno, «en esta legislatura es todo nuevo».
Cinco meses
A lo largo de su intervención, Rafa Ramírez recordó los momentos más críticos de esta crisis que dura ya casi cinco meses. El socialista afirmó que ahora mismo están en cuestión la honestidad, la integridad y el interés general. Sobre las grabaciones publicadas por Periódico de Ibiza y Formentera, Ramírez tuvo palabras tanto contra Córdoba como contra Sa Unió. Al presidente le recriminó, entre otras cosas, no ser transparente a la hora de explicar sus acusaciones de «asalto al poder» o de «presiones». Algo que, según explicó, no es «un comportamiento excelente ni transparente». Del mismo modo se dirigió hacia el cesado José Alcaraz, al que acusó de ser el autor de las grabaciones publicadas en exclusiva por Periódico de Ibiza y Formentera. Sobre la gestión de Sa Unió, Ramírez afirmó que es «un desastre» por culpa de la crisis. Y ha puesto también sobre la mesa el papel que está jugando en esta situación el Govern de Marga Prohens, que «no toma partido» pero que «parece que sí» apoya a Llorenç Córdoba.
Ramírez, por otro lado, dejó claro que los socialistas no apoyarán una moción de censura contra el presidente, como pretende Sa Unió. Y es que, según destacó, «el PSOE no hará presidente a José Alcaraz». Una afirmación ante la que intervino la consellera y pareja de Alcaraz, Verónica Castelló, que en ese momento moderaba el debate y que, con la excusa de conminar a Ramírez a finalizar su intervención, evitó que se siguiera hablando de la posible moción de censura y de quién podría sustituir a Córdoba al frente del Consell. El socialista le respondió que le ampara la Constitución para expresar sus posicionamientos políticos ante el Pleno. «Si no está de acuerdo», según añadió, «lléveme a un juzgado».
Tal y como era de esperar, GxF votó a favor de esta propuesta. Su portavoz, Alejandra Ferrer, aseguró que la crisis que atraviesa la institución «no tiene precedentes» y precisó que aún no se conocen «todas las causas» de la misma. Ferrer subrayó que ni Córdoba ni Sa Unió están «están asumiendo responsabilidades». Y lamentó que la coalición busque el respaldo de la oposición amenazando con que, si GxF y PSOE no votan a favor de la moción de censura contra Córdoba, «dimitirán en bloque».
Moción de censura
Alejandra Ferrer dejó claro que su formación no apoyará esta moción, además, porque «hay que poner a otro presidente y votar un programa electoral y unos políticos». «GxF no está de acuerdo», ha subrayado, «nos piden que votemos en contra de nuestra militancia y contra nuestras políticas y eso no es posible. Una moción de censura es para cambiar de gobierno. Y por esto hay que convocar esta comisión».
Ya en el turno de preguntas, la tensión volvió a ser palpable en el salón de plenos del Consell formenterés. A preguntas de GxF, Córdoba explicó que no tiene intención de «acumular responsabilidades» pero que, de momento, no le ha sido posible reunirse con los consellers de Sa Unió para hacer un nuevo reparto de las carteras tras el cese de José Alcaraz. Más incisivas fueron las preguntas formuladas por el socialista Ramírez, quien cuestionó a Córdoba por los motivos de la crisis. Éste respondió que esta situación «no se explica con términos políticos» pero descartó ir más allá. El presidente insistió en que es víctima de diferentes presiones, aunque tampoco profundizó en más detalles. Y sí afirmó que ha puesto en manos de la Guardia Civil las grabaciones que publicó en exclusiva Periódico de Ibiza y Formentera. En este sentido, Llorenç Córdoba señaló que «si se tiene conocimiento de un posible delito, se tiene que comunicar donde corresponda», por lo que él ha hecho lo propio dirigiéndose a la Guardia Civil: «Si hay un delito, que hagan las actuaciones que haya que hacer», concluyó.