No habrá, de momento, moción de censura con apoyo del PSOE contra Llorenç Córdoba en el Consell de Formentera. Así, al menos, lo ha señalado el secretario general de la formación en la isla, Rafa Ramírez, quien ha señalado a modo de justificación que «no se está contando toda la verdad» en la grave crisis en la que Córdoba y Sa Unió han sumido a la institución insular. «Ni siquiera la dimisiones de los consellers de Sa Unió son de verdad», ha denunciado Ramírez en este sentido.
El socialista ha asegurado que, en estos momentos, «no hay ningún documento oficial» que demuestre que las renuncias anunciadas por siete de los ocho consellers de la coalición el pasado viernes son reales. Además, Ramírez ha recordado que el conseller de Turismo, Artal Mayans, «sí ha ido a trabajar este lunes», lo que, en su opinión, significa que «ahora está más cerca de Llorenç Córdoba». Fuentes del Consell de Formentera, sin embargo, han asegurado que las renuncias han sido presentadas formalmente y que serán efectivas a partir de este miércoles, tras la celebración de la Junta de Gobierno, que «tiene que aprobar el acta de la sesión anterior».
Desde el PSOE se observa la estrategia de Sa Unió como una mera «dejación de funciones». Y es que, ha recordado Rafa Ramírez, mientras las dimisiones no sean efectivas, «todos ellos deberían estar trabajando». El socialista se ha preguntado qué pasará si esta semana los consellers de Sa Unió no acuden a la Junta de Gobierno e, incluso, ha puesto en duda que vaya a celebrarse a finales de este mes el Pleno insular correspondiente al mes de junio.
«Son ellos quienes tienen la solución», ha señalado, «Córdoba dice que puede trabajar con los consellers que quieran hacerlo. Y ese es el caso de Artal Mayans. Lo que está claro es que Sa Unió tiene aún elementos que puede manejar para resolver esta situación».
A pesar de todo, desde el PSOE tienen claro que la crisis debe zanjarse con «alguna dimisión». En este sentido, Rafa Ramírez ha apuntado directamente hacia Llorenç Córdoba y el cesado José Alcaraz, que hoy ejerce únicamente como portavoz de Sa Unió en el Pleno. «Deberían dimitir por ética y por responsabilidad», ha añadido, «todo esto es un juego de trileros».
Rafa Ramírez, finalmente, ha señalado que, como secretario general del PSOE, no puede afirmar sin consultar a la ejecutiva del partido si apoyarán o no una posible moción de censura contra Córdoba. Algo que ahora sí sería factible dado que, a partir del miércoles los consellers de Sa Unió pasarán del Gobierno insular a la oposición. Sin embargo, Ramírez ha indicado que, ahora mismo, la única posibilidad de que saliera una moción de censura adelante sería si la coalición cediera un conseller a los partidos de la oposición, PSOE y GxF, para que fueran estos los que gobernaran. «Yo prometo que no habrá encapuchados en las reuniones», ha afirmado tirando de ironía.