205 personas han llegado a las costas pitiusas desde el pasado lunes. La gran mayoría de ellas, 192, han desembarcado en la isla de Formentera, mientras que las 13 restantes han llegado a la zona de Cala Oliva, en Santa Eulària. El día de más actividad en este sentido ha sido el miércoles, cuando han llegado a las costas formenterenses nada menos que siete pateras.
La consellera balear de Asuntos Sociales, Catalina Cirer, ha asegurado que el miércoles Baleares fueron «el punto de España que recibió más pateras con personas a bordo, por encima de Canarias». Cirer ha explicado que, desde el pasado lunes, han llegado al archipiélago más de 600 inmigrantes a bordo de 40 embarcaciones. La consellera ha admitido que la situación no es aún «crítica y difícil» pero sí ha advertido de que las Islas «corren el riesgo» de convertirse en algo parecido a Canarias, según ha recogido Última Hora.
Cirer ha subrayado que ha que plantear al Gobierno de forma «insistente» que «haga caso a las peticiones que hizo la presidenta Prohens en la Conferencia de Presidentes». La consellera ha añadido que es también necesario recurrir a la UE porque «el Estado español (sic) no quiere un control de fronteras para las Islas».
La consellera autonómica, además, ha recordado que Baleares no cuenta con ningún centro de inmigración como otras zonas de España y que solo dispone de «instalaciones custodiadas por la Policía Nacional». Por este motivo ha exigido la «deportación» estos inmigrantes a la Península. Algo que, ha admitido, «generará conflictos con centros» de otros puntos de España.
En Formentera, el Consell ya ha anunciado que ha iniciado los trámites para devolver al Govern la competencia en Menores, dado el elevado número de menores de edad que llegan a bordo de las pateras y de los que no puede hacerse cargo. Fuentes de la institución han señalado que «tuvo que plantearse seriamente la devolución de las competencias de menores después de que el Gobierno central abandonara a su suerte a los menores inmigrantes no acompañados que llegan a las islas en patera y a los consells insulares, que tienen la obligación de tutelarlos».
Formentera
Las mismas fuentes han indicado que «Formentera ha pasado de tener 10 menores no acompañados el año pasado a tener 95 en 95 en lo que va de año». Y han añadido: «La institución insular tiene estas competencias desde 1997, pero la situación ahora es muy diferente a la de aquellos tiempos. Ahora hay un boom migratorio y en aquellos tiempos la llegada de pateras a la isla era algo más que anecdótico, por no decir totalmente improbable».
El Consell formenterés ha recordado que la atención que ha de dar a estos menores significa actualmente desviar «servicios y recursos que tendrían que utilizar para la gente de la isla». «Por el momento se está cumpliendo económicamente», han explicado, «pero la proyección del gasto que tiene para la institución atender debidamente a estos menores supone prácticamente el 20% del presupuesto anual, algo totalmente inviable para una economía como la de Formentera».
El cada vez más elevado número de pateras que llega a la isla preocupa especialmente a la institución insular. Y es que, han recordado, «las islas a las que Formentera enviaba a estos menores por la falta de infraestructuras en la isla, Mallorca e Ibiza, ya están también saturadas con sus propios menores tutelados». Algo que ha provocado que, en algunos momentos, el Consell haya tenido que albergar a estos menores en su Casa de Colonias, además de tener que habilitar «algún recurso más».
En el caso de Ibiza, la situación también preocupa. Esta última oleada de pateras ha significado el ingreso de cuatro nuevos menores en los servicios de tutela insular. El Consell ha sacado a adjudicación 32 plazas para acoger a estos menores pero, de momento, todos los servicios destinados a los mismos están «tensionados». No obstante, desde la institución insular ibicenca han asegurado que «se da respuesta a todos».
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