La polémica en torno a la Reserva Marina de es Freus, en Formentera, sigue abierta tras la petición del Consell Insular de paralizar temporalmente la ampliación propuesta por la Conselleria de Agricultura, Pesca y Medio Natural. Una decisión que, según el Consell de Formentera, busca abrir un espacio de diálogo con los agentes implicados para «alcanzar un consenso».
No obstante, para los pescadores recreativos en Ibiza y Formentera, este anuncio es un simple movimiento para ganar tiempo, ya que, según este sector, todavía no se ha paralizado nada. Cabe recordar que el pasado 16 de julio se informó de la intención del Govern balear de ampliar la Reserva Marina de es Freus hasta unirla a la de sa Punta de sa Creu. Con esta ampliación este espacio protegido pasaría de 15.500 a 21.190 hectáreas.
En este sentido, Diego Alcalde, presidente de la Plataforma de pesca recreativa en las Pitiusas, destacó ayer a Periódico de Ibiza y Formentera el descontento de la Cofradía de Pescadores de Formentera, especialmente el malestar del presidente de la entidad tras conocer esta información, ya que era favorable a la ampliación de esta reserva. «Lo que quieren es parcelar el mar para poder hacer negocio con el recurso marino», denunciaron desde el colectivo de pesca recreativa, resaltando que desde esta entidad compararon a los pescadores recreativos con «vendedores ambulantes» frente al comercio establecido.
Una comparación que rechazaron totalmente, explicando que este colectivo pesca para comer, invirtiendo en sus embarcaciones y en su aparejo. «No hacemos negocio. El pescado que sacamos es para nuestras familias», agregaron, haciendo hincapié en que hay profesionales que pescan sin respetar tallas ni límites. Al preguntar por esta paralización solicitada por el Consell de Formentera – que había respaldado inicialmente la ampliación – Alcalde precisó que la presión social de estas últimas semanas ha podido hacer rectificar a la institución insular, así como la recogida de firmas impulsada por los recreativos contra las restricciones que sufren en las reservas marinas.
«El Consell ahora defiende abrir un proceso de diálogo con todas las partes antes de tomar una decisión definitiva. Sin embargo, esta vía tampoco genera confianza», precisaron. Esta desconfianza también se dirige hacia el director general de Pesca del Govern, Antoni Grau, y hacia el propio Govern, a quienes acusan de maniobrar en favor de la Cofradía. «Dicen que nos permitirán pescar con normalidad en las reservas, pero eso es mentira. Las normativas son cada vez más restrictivas y absurdas», explicaron, insistiendo en que la Cofradía busca «parcelar el mar» para explotarlo como si fuera un recurso privado.
«Es como si los taxistas dijeran: estas carreteras son sólo para nosotros, los particulares no podéis circular. Ellos quieren que sólo los profesionales puedan acceder al mar», denunciaron, resaltando la necesidad de más reservas integrales para proteger la fauna marina. Al respecto, defendieron cómo en la reserva integral situada al este del islote de s’Espardell sí funciona la protección. «Es un área donde no pesca nadie y el ecosistema se regenera. Pero lo que no puede ser es inventarse reservas de interés pesquero que en realidad son cotos privados para unos pocos», denunciaron, cargando contra las normativas actuales, que califican de «enrevesadas y diseñadas para expulsar a la gente del mar».
Entre los ejemplos que citaron está la limitación de capturas: «Si sales a pescar y coges una rotja, ya no puedes coger otra. En cambio, los profesionales pueden llenar cajas enteras de piezas pequeñas que aún no han llegado a la fase reproductora. Eso sí que destruye la fauna marina, pero nadie lo cuestiona porque genera negocio», apuntaron. Otro caso que denunciaron es la regulación de los aparejos: «En una tienda te venden un paquete con seis plumillas para pescar, y si te paran con eso en la reserva, te pueden multar». En el debate apareció también la referencia a los compromisos internacionales.
La Unión Europea exige que en 2030 el 30 % de las aguas esté protegido, de los cuales un 10 % debe ser de protección estricta, es decir, reservas integrales. Los recreativos agregaron que el Govern está tergiversando esta exigencia: «Europa no pide inventarse reservas de interés pesquero. Lo que pide es protección estricta, donde no se pesque nada. Y eso no se está cumpliendo. En lugar de aumentar las reservas integrales, se dedican a crear cotos privados que favorecen a unos pocos». Uno de los argumentos más repetidos por este sector es que esta práctica forma parte de la cultura de las pitiusas. «Muchos de los que pescamos somos hijos o nietos de profesionales que ya no se dedican a ello porque tienen otros trabajos, pero seguimos manteniendo la tradición de salir al mar y pescar nuestro propio pescado».
El malestar del sector apuntó también hacia el Govern presidido por Marga Prohens. El colectivo recordó que muchos pescadores y familias vinculadas al mar apoyaron al PP en las elecciones, y advirtieron de que el descontento puede traducirse en pérdida de votos. «Nos reuniremos con el conseller balear de Agricultura, Joan Simonet, en su próxima visita a Ibiza, que está prevista para principios de septiembre», adelantaron.
Es curioso como a los que hacemos pesca recreativa nos quieren convertir en terroristas medioambientales, pero muchos sabemos que los de la cofradía salen entre amigos a pescar y no todo ese pescado pasa por la cofradía. ¿Ahí no pasa nada? Aquí, o todos moros o todos cristianos. Si hay gente cometiendo irregularidades, que pongan más control, y el que la haga, la pague. Pero los que llevamos pescando toda la vida, con nuestra licencia y nuestras tasas al día, no tenemos por qué pagar el pato de la incompetencia de otros. A ver si ahora los ibicencos (entiéndase por todo residente legal) no vamos a poder pescar nuestros calamares o nuestras serviolas como hemos hecho toda la vida. En España, y especialmente en Ibiza, prima la norma de "primero pase por caja". Espero que las firmas que se han juntado, y me consta que no son pocas, sirvan para mostrar el desacuerdo generalizado que tenemos los pescadores recreativos.