El núcleo urbano de sa Roqueta, uno de los puntos con mayor presión turística de la isla de Formentera, se encuentra inmerso en un ambicioso proceso de remodelación integral que pretende resolver problemas históricos de movilidad, accesibilidad y degradación ambiental. Los trabajos, impulsados por el Consell Insular de Formentera, tienen un presupuesto de 1.572.324,17 euros, financiadas en parte con fondos europeos Next Generation EU. Este proyecto supone una intervención largamente reivindicada y planificada desde hace más de tres décadas.
Sa Roqueta está situado junto a la carretera PM-820-1, el eje viario que conecta es Pujols con la Savina, y concentra cuatro establecimientos turísticos, el acceso a una de las playas de Llevant y el límite directo con el Parque Natural de Ses Salines. Pese a su importancia estratégica, el enclave arrastraba importantes deficiencias urbanísticas y de servicios, agravadas especialmente durante la temporada alta, cuando la afluencia de visitantes se multiplica.
El proyecto de urbanización y adecuación que ahora se ejecuta da cumplimiento a una actuación ya prevista en las Normas Subsidiarias de 1989, posteriormente recogida en el Plan Territorial Insular (PTI) de 2010 y desarrollada definitivamente mediante una modificación puntual aprobada en 2020. Se trata, por tanto, de una intervención estructural destinada a corregir un modelo urbano obsoleto y adaptarlo a las necesidades actuales de residentes y turistas.
Entre los principales problemas detectados se encontraban la falta de accesibilidad para personas con movilidad reducida, aceras insuficientes, viales inseguros para peatones, carencia de plazas de aparcamiento y ausencia de espacios destinados a la movilidad eléctrica. A ello se sumaban paradas de autobús mal ubicadas, sin condiciones adecuadas de seguridad, y una red viaria saturada, especialmente por el intenso tráfico de la carretera PM-820-02, una de las más transitadas de la isla en verano al dar acceso a las playas del norte y atravesar el Parque Natural.
La situación se veía agravada por una deficiente gestión de residuos, con contenedores frecuentemente desbordados, problemas de insalubridad y proliferación de fauna salvaje en un entorno ambientalmente sensible. También la red de agua presentaba un estado deteriorado que impedía una distribución eficiente, mientras que la imagen general del núcleo era percibida como descuidada y poco acorde con un destino turístico de calidad.
Para dar respuesta a esta problemática, el proyecto contempla una intervención integral sobre el espacio público. Las obras incluyen la ampliación y reorganización de las zonas de estacionamiento, con 17 nuevas plazas convencionales, 2 para personas con movilidad reducida, 3 para vehículos eléctricos, 17 para motocicletas y 22 para bicicletas. Esta redistribución permitirá ordenar el tráfico y reducir los estacionamientos incontrolados que dificultaban la circulación y el transporte público.
En paralelo, se redefinen las paradas de autobús, con la instalación de nuevas marquesinas, la creación de accesos peatonales seguros y la reubicación de los puntos de parada para facilitar tanto el uso por parte de los pasajeros como las maniobras de los vehículos. También se contempla la limitación de la velocidad en el tramo urbano de Sa Roqueta, reforzando la seguridad vial.
La actuación se enmarca dentro de las líneas subvencionables destinadas a la mejora de infraestructuras públicas, la gestión ambiental, la movilidad sostenible y la recalificación de infraestructuras turísticas obsoletas. El uso de fondos europeos Next Generation EU obliga, además, al cumplimiento de criterios ambientales como el principio de no causar un perjuicio significativo al medio ambiente (DNSH). El pasado mes de mayo, Jaume Bauzà, conseller balear de Turismo, visitó los trabajos. «Con esta actuación, el Govern demuestra —una vez más— su apuesta por un modelo turístico de sostenibilidad, equilibrio y calidad. Es fundamental modernizar las infraestructuras públicas y apostar sin fisuras por la preservación de los espacios naturales de todas nuestras islas», expresó durante su visita en mayo.