La I Feria de Alimentación y Hostelería de las Pitiüses, Alimenta 1999, cerró ayer sus puertas con un importante éxito de asistencia, que quedaba patente por la gran cola de automóviles que esperaba para entrar en el recinto ferial del Consell Insular ayer por la mañana.
Han sido tres días y medio en los que 45 empresas de alimentación y bebidas "así como maquinaria para el sector y medios de comunicación" han mostrado sus bazas para esta temporada turística que se avecina.
Sin embargo, algunos empresarios mostraron su disconformidad con las fechas escogidas para celebrar esta muestra, puesto que, según su opinión, los hoteles y mayoristas de las Pitiüses ya tienen cerradas todas sus compras para el verano.
Sobre el número de visitas que ha recibido la muestra, una de las responsables del recinto ferial del Consell no quiso ayer dar ninguna cifra oficial, pero sí un cálculo: en sólo 15 minutos de la tarde del sábado se contabilizaron hasta 310 personas que entraban en la exposición. Para algunos de los expositores, la notable aceptación que ha tenido la feria entre el público se debió a las catas de los productos que se ofrecían.