La próxima liberalización del correo en Europa ya ha empezado a notarse en Eivissa, donde desde hace unos meses funciona una nueva compañía dedicada a los envíos internaciones. International First Class Courier (IFCC) ha instalado unos 150 buzones en distintos hoteles y establecimientos turísticos de la isla y también ha comenzado a trabajar con empresas.
El nuevo operador postal se dedica exclusivamente a la correspondencia internacional y, según destacó ayer el gerente de la compañía, Juan Triol, su principal baza es la rapidez. «Las cartas salen de Eivissa en el último vuelo de mensajería hacia Madrid y, al día siguiente, se envían a las centrales de Londres, Zurich y Frankfurt, desde donde se redistribuyen», señaló Triol.
IFCC, que ha entrado en la costa mediterránea y Canarias, garantiza las entregas cualquier punto de Europa en cuatro días. La rapidez está garantizada porque esta compañía trabaja con correos de los tres países donde tiene las centrales de distribución. Su principal inconveniente, por ahora, es el precio: los envíos ordinarios cuestan 350 pesetas, cinco veces más que la tarifa pública, tal y como marca la legislación vigente.
La próxima liberalización de correos, no obstante, ha provocado enfrentamientos entre el ente público Correos y Telégrafos y IFCC. Según relató ayer el asesor jurídico de la compañía, Manuel Gallego, Correos ha amenazado con denunciar a IFCC porque asegura que está funcionando sin el permiso del Ministerio de Fomento, algo que la nueva compañía ha desmentido rotundamente.