El conseller d'Educació del Govern, Damià Pons, pidió ayer a los padres de alumnos del instituto Xarc de Santa Eulària «un tiempo prudencial de confianza para arreglar los problemas». Pons demandó a todos los colectivos del instituto que acepten la propuesta del turno de tarde y demandó a los padres «que tenga en cuenta los criterios pedagógicos».
A su juicio, «los padres tienen todo el derecho del mundo sentirse estafados», pero pidió que se comience el curso y que tengan confianza «en esta administración para que en el término de uno o dos cursos se resuelva el problema y no interpreten que el doble horario se consolidará los siglos por los siglos».
El conseller explicó que la decisión de implantar el turno de tarde (sólo para alumnos de bachillerato y FP), que ha determinado la convocatoria de huelga, «es las más coherente desde el punto de vista pedagógico». El conseller señaló que, de este modo, la educación obligatoria queda en un bloque horario y permitirá descongestionar el centro e introducir una mayor dosis de tranquilidad en la vida del instituto.
Añadió que el instituto contará con tres profesores «más de lo que le corresponden para tener una atención más personalizada a los alumnos del centro que lo necesiten». La Conselleria justifica esta decisión ante «las posturas antagónicas y casi irreconciliables» tanto de padres, defensores del turno de tarde, como profesores, partidarios del turno de tarde para bachilleratos, FP, y cuarto de ESO.