El Govern tiene previsto aprobar este mismo mes la modificación de las Directrices de Ordenación Territorial (DOT) para blindar los aspectos polémicos de la ley urbanística de urgencia. El president Francesc Antich confirmó a este periódico que su gabinete está trabajando a marchas forzadas para aprobar «en dos o tres semanas los cambios de las Directrices». Tras el Consell de Govern Antich reconoció que algunos artículos incluídos en la ley de urgencia pueden ser malinterpretados, y en concreto se refirió a la disposición transitoria. Dicho artículo dice que «todos los proyectos de una vivienda unifamiliar en suelo rústico que, con la finalidad de obtener licencia de obras, se hayan presentada en el correspondiente ayuntamiento tres meses antes de la entrada en vigor de la presente ley se resolverán de acuerdo con la normativa anterior». «Este artículo tiene distintas interpretaciones», comentó Antich en la rueda de prensa posterior al Consell de Govern, y se mostró dispuesto a tomar «todas las decisiones políticas y jurídicas que sean necesarias para evitar confusiones».
Antich interpreta que dicha disposición transitoria establece que la nueva ley urgente urbanística no afecta a los proyectos registrados en los ayuntamientos. Es decir, los proyectos entregados entre julio y septiembre están regulados por la nueva normativa, pero no los registrados antes.
El Ejecutivo también está estudiando la situación de Es Canons. Los juristas del Govern están interpretando si con las Directrices la zona de Artà, donde está previsto construir una urbanización de 2.000 plazas, está o no protegida. En caso negativo la modificación de las Directrices contemplarán la protección de Es Canons.