La presencia masiva de trabajadores de los diferentes colectivos de inmigrantes que están asentados en Eivissa y Formentera marcó ayer la manifestación del Primero de Mayo, convocada por los sindicatos UGT y CC OO.
Unas 200 personas recorrieron la avenida de España, desde la calle Navarra de ses Figueretes hasta Vara de Rey, portando pancartas en las que se podía leer «Trabajar para vivir , empleo con seguridad» o «La diferencia es un hecho, la igualdad un derecho», agitando banderas sindicales y gritando consignas como «Es el 2000 y estamos aquí». Los secretarios generales de UGT y CC OO de las Pitiüses, Diego Ruiz y José Antonio Carmona leyeron sendos manifiestos al finalizar el recorrido.
Ruiz exigió medidas para mejorar tanto la protección de los desempleados como las pensiones y las condiciones para acceder a la jubilación anticipada y pidió el aumento de la calidad de la educación, la sanidad y los servicios públicos. «Los resultados de las últimas elecciones generales dando la mayoría absoluta al PP y dejando a los partidos de izquierda en una situación de crisis, colocan al movimiento sindical y a los sindicatos como única formula de oposición a la política neoliberal y privatizadora del nuevo gobierno», advirtió el dirigente de UGT.
En cuanto a la situación laboral en las Pitiüses, Diego Ruiz destacó que «se están dando los pasos para que, de una vez por todas, se formalice el diálogo social entre las organizaciones empresariales y sindicales más representativas y la Administración insular, por medio de la creación del Consell Económic i Social, mesas de trabajo sectoriales y la redacción de un plan de empleo para Eivissa y Formentera, que tiene como objetivos principales el estudio de la realidad insular y buscar medidas concretas para corregir algunas situaciones que no son propias de unas islas con este crecimiento económico».