Puede parecer contradictorio pero el correo de Eivissa llega antes en un barco, que tarda entre cuatro y cinco horas desde Palma de Mallorca, que en avión, aunque éste sólo tarde media hora en conectar Palma con Eivissa.
Correos y Telégrafos de Balears ha conseguido mayor regularidad en los envíos postales hacia Eivissa y Menorca tras contratar, hace ahora dos meses, espacio de carga de bodega en un barco de Baleària. Hasta julio de este año las sacas de envíos postales con destino Eivissa esperaban horas e incluso días en los almacenes de aeropuerto de Palma de Mallorca porque la falta de capacidad de los aviones turbohélice de Air Nostrum impedía cargar todo el correo que debía llegar a la isla.
La consecuencia de estos retrasos es evidente. El correo llegaba tarde a su destino, un hecho especialmente grave si se trataba de envíos urgentes. Ahora, aunque no se ha rescindido el contrato con la compañía aérea, ésta sólo transporta los objetos postales urgentes, que por su reducido volumen y peso, se puede introducir siempre en las bodegas de los aviones mientras que los barcos transportan los paquetes y las cartas franqueadas por el sistema normal.
«Con los barcos, que realizan un servicio diario, no hay problemas de carga y se pueden afrontar incrementos de hasta el 50 por ciento sin problemas», señalan desde la dirección de Correos y Telégrafos. La compañía asegura que la doble insularidad es un problema «inevitable» de cara a reducir los márgenes de calidad, que suelen ser de dos días en el caso del correo local, y de tres o cuatro días en el provincial. El interprovincial «siempre sufre más retrasos pero es lógico porque hay que salvar unas distancias», explican desde el organismo autónomo.