«Sa Nostra» revela en el «Informe Econòmic i Social de les Illes Balears 1999», que se presentó ayer en el salón de plenos del Consell Insular, las carencias sociales existentes en las Pitiüses. El subdirector general de la entidad financiera, Miquel Alenyà, destacó que hay que dar una cobertura especial a los sectores sociales más desfavorecidos: «Se necesita un impulso mayor. Las necesidades sociales han crecido más que el crecimiento general de la economía», subrayó.
El informe, que dedica 60 páginas a las Pitiüses e incluye una visión de los problemas sociales, medioambientales y de educación, recoge que la economía ha crecido en los últimos cuatro años a un ritmo intenso, continuado y sin interrupciones. Esta bonanza económica ha generado una mejora de los niveles de prosperidad y de bienestar en las Pitiüses. Sin embargo, el crecimiento ha sido tan intenso que ha creado impactos medioambientales «que no han podido ser absorbidos por el sistema natural de las Islas, con una utilización del territorio superior a lo deseable en un contexto de mayor equilibrio», añadió Alenyà.
Ante esta situación, opina que «sería importante arbitrar políticas medioambientales en un futuro, que permitan compaginar mejor el crecimiento económico con los requerimientos del medio ambiente, y compatible con políticas de redistribución y atención a sectores marginados».
En el informe se incluye un nuevo capítulo dedicado a la población, donde se recoge el aumento debido al avance migratorio y el crecimiento vegetativo. Actualmente hay 91.473 personas en las Pitiüses, una cifra histórica ya que supera por primera vez las 90.000.