Una ficha de observación y una cámara de vídeo. Estos han sido los instrumentos que los alumnos de tercero de ESO del Instituto Xarc de Santa Eulària han empleado para evaluar el estado en el que se encuentran las infraestructuras urbanas de su localidad. Durante la mañana de ayer presentaron el resultado de sus indagaciones. Éstas se desarrollaron en los edificios públicos de Santa Eulària, en cafeterías, medios de transporte y en el propio centro escolar.
La conclusión a la que han llegado es que en la mayoría de sitios visitados no se ha pensado en las personas discapacitadas, que se encuentran con barreras en el desempeño de sus tareas cotidianas. Un lugar que a priori tendría que disponer de comodidades para este colectivo es el ambulatorio. Allí en la entrada los discapacitados se encontrarán con dos escalones muy altos, que a personas que vayan con muletas o en silla de ruedas les afectan sobremanera porque pasan a depender de la solidaridad del resto de peatones.
El Consistorio de Santa Eulària se ha mostrado predispuesto a escuchar las conclusiones de los escolares, al apoyar este proyecto junto con Cruz Roja Eivissa. La dirección del centro espera darle utilidad ala la investigación, que sirva para concienciar a la sociedad de la necesidad de ser comprensiva con los discapacitados.
Es la primera vez que un grupo de alumnos acomete un trabajo de campo como este. Hoy por la mañana completarán la exposición de los motivos que les condujeron a investigar sobre este ámbito. Ayer iniciaron la exposición del vídeo y a su finalización expusieron el contenido. Así surgió el debate. El deseo de los alumnos es que desde ahora se midan las consecuencias de una mala disposición del mobiliario urbano y que se corrijan en la medida de lo posible las actuales barreras arquitectónicas a las que se enfrentan los discapacitados al salir a la calle.