Precipitaciones de 46 litros por m2, tormentas eléctricas en la costa, vientos de 38 kilómetros por hora, temperaturas mínimas de 70C y granizo ocasional. Esta es la descripción, en datos, del panorama meteorológico que se registró durante la mañana de ayer. Inundaciones, desborde de alcantarillado de pluviales y fecales, hedor pestilente en diversas zonas "principalmente es Pratet" y presencia de ratas es el desagradable panorama real que se encontraron ayer los vecinos de Eivissa.
A las 10'30 horas de la mañana, tras unos minutos de intensa lluvia, rotondas como la de la Avenida de Santa Eulària estaban anegadas hasta el punto de que no se distinguía la carretera de la zona circular central. En esta misma carretera, a la altura de las barcas de Formentera, era imposible distinguir dónde acababan las aceras y dónde comenzaba la calzada. Cerca de tapas de alcantarillado levantadas por sobrepresión de carga, caso de la existente en el cruce de Isidoro Macabich con Ignasi Wallis, se podían ver ratas de considerable tamaño muertas o arrastradas por la corriente.
Los bomberos tuvieron que realizar nueve intervenciones en el núcleo urbano de Eivissa y en Platja d'en Bossa entre las 10'15 y las 14'00 horas de ayer. Los efectivos, 15 bomberos divididos en 4 dotaciones de 2 ó 3 personas cada una, tuvieron que achicar agua de bajos y sótanos y desatascar alcantarillas en lugares como los sótanos de la Policía Local, Burger King, Disco Konga, Cafetería América y en calles como Extremadura, Carlos III o Vista Alegre, en sa Penya.