El Ayuntamiento de Eivissa ha solicitado formalmente al Govern de les Illes Balears la titularidad de la ronda E-10, más conocida como el primer cinturón de ronda, que transcurre por fuera de la ciudad de Eivissa desde la rotonda de entrada a la avenida España y hasta la rotonda de entrada a la avenida Santa Eulària.
Según confirmaron fuentes municipales, el alcalde Xico Tarrés y su equipo de gobierno entienden que esta vía tiene que pasar a ser municipal porque en pocos años quedará plenamente integrada en la ciudad, sin embargo, no quieren que el Govern la transfiera en su actual estado, sino dotada de una serie de infraestructuras básicas como pueden ser las aceras. De hecho, la petición de que esta carretera sea de titularidad municipal ya se barajó en tiempos del alcalde Enrique Fajarnés, a raíz de la construcción de la E-20 (la carretera que transcurre por detrás del hospital Can Misses) y que permite mantener conectadas entre sí las carreteras de Eivissa de titularidad autonómica, un requisito imprescindible. Sólo al existir la E-20, que permite cumplir con esa condición, el Govern puede plantearse ceder la titularidad de la E-10.
El hecho de que la ronda pase a depender directamente del Ayuntamiento puede tener gran importancia en los próximos años, puesto que esta vía será fundamental para conectar la zona del instituto de sa Colomina y el bulevar Abel Matutes con el barrio de Can Misses, en fase de expansión urbanística, así como para abrir nuevas entradas a la ciudad.