El hotelero de Sant Antoni dijo ayer por la noche sí a Dania. Toni Pike escogió este día para consolidar su amor con la marroquí y para demostrar que no todos los procedentes de los países de árabes tiene porqué ser terroristas, acorde con los últimos acontecimientos sufridos en Estados Unidos.
La ceremonia se celebró en el propio hotel Pikes, donde acudieron los amigos más íntimos de la pareja, ya que no desearon que fuera un acto demasiado popular. El banquete se compuso de un 'buffet' improvisado y un plato que los comensales comieron al ritmo de la música que dj Pippi puso durante la velada.
Así transcurrió la velada, con el gesto de solidaridad y tolerancia de los casados y con una copa que transcurrió en los aledaños de la piscina del complejo hotelero. «Estoy feliz, tenía muchas ganas de unirme a Dania de manera oficial, que hubiera algo legal que nos reconociera como matrimonio», apuntó Toni Pike en un momento de la noche. La fiesta se prolongó hasta altas horas de la madrugada. La música elevó su intensidad al terminar la cena.