Los miembros de la Asociación de Establecimientos Turísticos de Entretenimiento de la Bahía de Portmany consideran que la recogida de basura y la limpieza del municipio dejan bastante que desear. Según explicó el sábado su presidente, Christopher Langley, ese problema se podría mejorar «considerablemente» si pagan más aquellos que «originan mayor cantidad de basura y suciedad».
Los establecimientos to take away (para llevar) son los que deberían abonar más tasas, según los empresarios de la bahía. Incluso proponen nuevas tarifas: los que sólo venden patatas, dulces y bebidas en lata para consumir fuera del establecimiento deberían pagar un 25 por ciento más; los que ofrecen sandwiches, comidas preparadas y bebidas para llevar, un 50 por ciento más, y, finalmente, los locales que están dirigidos principalmente a la venta de comidas y bebidas to take away tendrían que abonar un cien por cien más. Estos últimos son «los que por su propia naturaleza animan a sus clientes a llevarse los productos fuera y son los principales culpables de que haya tanta comida y envoltorios» tirados por las calles, acusan los empresarios.
Otros que, según la asociación, deberían pagar más son los propietarios de máquinas expendedoras, «que tendrían que ser gravados con impuestos especiales».
En ese tono de denuncia, aconsejan que los policías puedan
multar con un mínimo de 5.000 pesetas a cualquiera que tire
envoltorios o envases al suelo.