El PSIB-PSOE y Esquerra Unida (EU-IU) presentaron ayer ante el Tribunal Supremo una querella criminal contra el ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, en la que le acusan de delito electoral, falsedad documental, malversación de caudales públicos y asociación ilícita durante su presidencia del Govern. Santiago Ferrer, diputado socialista balear, entregó la querella en nombre de los partidos que forman el ahora gobernante Pacto de Progrés (PSIB-PSOE y Esquerra Unida) por el «caso Formentera», una presunta manipulación electoral en las elecciones de 1999 para conseguir un diputado más por Formentera. Tras presentar la querella, también dirigida contra otros ex cargos, como la entonces consellera de Presidència Rosa Estaràs, el diputado Ferrer dijo tener «serios indicios» de que se produjo «casi el peor delito contra la democracia, que es el manipular votos e intentar adulterar su esencia».
Por su parte, el portavoz del PP, Rafael Hernando, indicó que la querella presentada contra Matas supone un acto de «miseria política», llevado a cabo por la dirección de un Gobierno «incapaz» de gobernar en Balears. Hernando, quien defendió la honradez de Jaume Matas y de la ex consellera de Presidència Rosa Estaràs, contra la que también va dirigida esta querella criminal, señaló que el Govern de Antich se ha convertido en una «rémora» para el desarrollo de las Islas y «cada día que pasa cae más en el ridículo del desgobierno».
Finalmente, el portavoz y secretario general del PSM Entesa Nacionalista de Balears, Antoni Alorda, mostró ayer su convencimiento de que Matas «fue el artífice de la trama» por la que supuestamente se captaron 74 votos de emigrantes argentinos y uruguayos en los comicios autonómicos de 1999. Así, reiteró que se sumarán como acusación popular a la querella presentada ayer contra Matas por PSOE e IU ante el Tribunal Supremo. Alorda explicó que su partido siempre ha considerado necesario elevar este tema a Madrid.