L.F.A./R.C.
El presidente de la Federación Hotelera de Eivissa y Formentera, Pedro Matutes, confirmó la recuperación «lógica» en la venta de reservas, pero recordó que los datos de finales de año eran muy malos en el mercado británico (con una caída del 30% de compras anticipadas). Duda de que las ventas de los primeros días de febrero hayan sido suficientes como para paliar la caída que se padece. «Hasta que no haya datos estadísticos más fiables (como el panel Nielsen sobre reservas)», Matutes cree que es aventurado hacer caso de especulaciones.
Los hoteleros de Mallorca aseguran que lo que mejor se está vendiendo es la oferta de «todo incluido», un sistema que está recibiendo muchas críticas por parte de los empresarios de la oferta complementaria. Éstos aseguran que el cliente se queda en el hotel y no hace más gasto. Pedro Matutes puntualiza que lo que más se vende en las Pitiüses es o el máximo servicio (todo incluido), o el mínimo servicio (modo apartamento). Este último sale a precios económicos y el «todo incluido» es apreciado por las familias, ya que tienen la certeza de lo que va a costar el conjunto de las vacaciones. «Los problemas de aumento de precio de la oferta complementaria no sólo en Eivissa sino en toda España, unidos a la caída de la renta disponible de las familias en el Reino Unido y en Alemania, ha provocado que los turistas se decanten por una opción que les da mayor certeza sobre el coste de sus vacaciones», explica Matutes, que considera que el turista de «todo incluido» también gasta fuera del hotel. El problema, a su juicio, es que ha habido una caída general de gasto turístico no sólo por parte de turistas de «todo incluido» (que representan un 10 por ciento sobre el total) «sino de todo tipo de visitantes».