El Institut Balear de l'Habitatge (Ibavi) ha comenzado a aplicar el derecho de compra preferente de aquellos pisos que quieren revender sus actuales propietarios. Con esta medida -la obligación de ofrecer la vivienda en primer lugar al Govern-, la empresa pública busca evitar posibles fraudes en la venta de unas viviendas que se construyen gracias a una subvención de la administración.
Lo que ha hecho el Govern es incluir el derecho de tanteo y retracto en los contratos de venta de los pisos. De esta forma, si un propietario al que en su día se le concedió una vivienda protegida quiere venderla, debe ofrecérsela primero al Govern. Ello consigue hacer desaparecer del mercado posibles cantidades de dinero negro, habituales en las transacciones inmobiliarias. También permite que un adjudicatario de un piso del Ibavi lo venda al Govern a un precio ya estandarizado y no haga negocio con la venta de una vivienda que se construyó gracias a una subvención del Ejecutivo y que, por lo tanto, su precio era más barato que el precio de mercado, según explicó el gerente del Ibavi, Segismundo Morey.
Una vez que el Govern ya aplica el derecho de tanteo y retracto en las viviendas que oferta el Ibavi, el segundo paso es conseguir que esta medida se incorpore también en las promociones de Viviendas de Protección Oficial (VPO). Según Segismundo Morey, el Ibavi se haría cargo de estos pisos y después podría volver a venderlos a precio tasado o dedicarlos a alquiler para personas con rentas más bajas.
El gerente del Ibavi señaló que esta reversión de la propiedad al Ibavi, permitirá al Govern de una red más amplia de pisos que compensaría, en cierta medida, los problemas del Ibavi para hacer nuevas promociones ante la falta de suelo público. «El Govern quiere ser inflexible en este aspecto para evitar un lucro indebido y conseguir pisos para otras personas que sí lo necesitan», dijo.