E n las instalaciones deportivas de Santa Eulària había niños por
todas partes: en la piscina, en el pabellón, en la pista de
atletismo y en el campo de fútbol, viviendo el deporte no como
competición sino como una actividad de ocio, sin pretensiones de
ganar al de al lado o ser mejor que el compañero. Es por ello por
lo que dejaron de organizar las Olimpiadas, que era una competición
pura y dura, y se pasó a hacer las jornadas lúdicas «que no buscan
ningún tipo de competición, y cuyo fin es que conozcan a otros
compañeros de otro colegio y que se diviertan, que se lo pasen
bien», dice Marga Domingo, coordinadora de las jornadas.
Bajo un sol reluciente y unas instalaciones en perfecto estado de
'salud', los niños de varios colegios, Santa Eulària, Jesús y Sant
Carles, disfrutaron durante toda la mañana de ayer, de una muy
variada gama de actividades deportivas, organizadas por el
Ayuntamiento de Santa Eulària y patrocinadas por el Consell
Insular.
Con camisetas diseñadas por los propios escolares (este año el
ganador del concurso ha sido Juliano Bancheri, que dibujó una
manzana jugando al baloncesto, del colegio de Santa Eulària), y con
los colores representativos del parchís, el rojo, el verde, el
amarillo y el azul, se les podía ver haciendo aeróbic,
divirtiéndose en la piscina con toboganes y pulpos hinchables,
aprender a jugar al «rugby», hacer relevos, carreras de obstáculos,
lanzamientos y saltos.
Las actividades deportivas van cambiando cada año.Éste, se ha
pasado del salto de pértiga al lanzamiento y los relevos, del
voleibol al aeróbic y el rugby. Este deporte, siempre adaptado a la
edad de los escolares. Para los niños de seis a ocho años es una
iniciación al rugby a través del juego, mientras que para los más
mayores está más centrado en lo que es el rugby en sí, con sus
reglas y técnicas.
Hubo gustos para todos los colores. Mientras a Paula Marí y Alba
Molina, del colegio Nuestra Señora de Jesús, «la piscina es lo que
más nos gusta porque está fresquita», a Àngel Carrión, del Santa
Eulària, le «gustan mucho los juegos de lanzamiento». Por el
contrario, a Sara Padial, del Sant Carles, una chica muy deportista
según su profesora, y que ha sufrido un pequeño tirón en la pierna.
«Lo que me gusta es el pin-pon y el atletismo». Como le ocurre a
varios de sus compañeros, a Sara, tampoco le gusta el aeróbic
porque tiene que bailar.
C.V.
Jugar pero no competir
Los colegios e instituto del municipio de Santa Eulària viven durante ocho días sus IV Jornadas Deportivas Escolares 2004