El grupo político Unión Cívica denunció ayer el embargo de sus bienes por parte del Ayuntamiento de Eivissa debido a una sanción impuesta por valor de 363 euros. El grupo político fue multado en el mes de abril del año pasado por repartir propaganda política fuera del periodo electoral.
José Manuel Soria Rico, presidente de la gestora de Unión Cívica, mostró su indignación al calificar la sanción de «persecución política y discriminación» que están sufriendo. Asimismo, Soria también criticó que la persecución «atenta contra el derecho a la libertad de expresión y sólo la sufre un sólo partido político que es el nuestro».
Según explicó el presidente de la gestora de Unión Cívica la sanción no fue llevada por el curso normal sino que en lugar de ser archivada continuó su tramitación hasta llegar a la actual amenaza de embargo de los bienes del partido.
Por otra parte, Soria, arremetió contra el Ayuntamiento de Eivissa donde, señaló, «se han instalado el nacionalismo catalanista que amamantan y protegen tanto Xico Tarrés como Pedro Campillo».
Además, el grupo político también aprovechó la ocasión para denunciar la inexistencia del bilingüismo en las administraciones de la isla. «Ahora mismo, en el Ayuntamiento de Eivissa nadie atiende al ciudadano en castellano, y si existen dos lenguas, éstas deben coexistir», señaló José Manuel Soria.