Tras una campaña atípica, afrontada como un mero compromiso por los dos principales partidos políticos, no hubo sorpresas en Balears, donde ganó el «sí» a la Constitución europea y en una jornada electoral marcada por una altísima abstención. En las Islas sólo votaron ayer domingo prácticamente tres de cada diez ciudadanos en un referéndum marcado por el desinterés, el desconcierto y, sobre todo, por la falta de información. Otro hecho que pone de manifiesto el desconcierto vivido en este referéndum es el importante número de votos en blanco, una prueba más de que muchos ciudadanos de Balears no sabían muy bien lo que votaban y para qué serviría sus votos. En este clima de apatía general, el 77'59 por ciento de los electores de las Islas votaron «sí» a la Constitución europea - un punto por encima de la media nacional- frente a un 16'08 por ciento que rechazaron el Tratado. El 6'36 por ciento de los votantes votaron en blanco.
Pero la abstención fue la gran protagonista de la jornada electoral. Apenas el 33'27 por ciento de los ciudadanos acudieron a votar a los colegios electorales, prácticamente vacíos durante todo el día. Por lo tanto, el referéndum a la Constitución europea ha registrado una abstención récord en Balears, un desinterés por ir a votar que ni siquiera se había registrado en unos comicios para elegir a los representantes españoles en el Parlamento europeo. Por islas, Formentera registró hasta un 69'87 por ciento de abstención, seguida de Eivissa, con un 69'35 por ciento, y de Menorca, con un 68'28 por ciento. Mallorca, con un 66'17 por ciento de abstención, fue la isla donde se registró un mayor índice de participación, aunque con un nivel muy inferior a otras consultas electorales.