La cantera de Santa Bárbara, en Cala Llonga, se abrirá de nuevo en las próximas semanas para albergar el primer depósito controlado de materiales inertes de la isla. Reciclajes y Derribos Santa Bárbara S.A, sociedad de la que forman parte Readymix Asland y Herbusa, presentará el miércoles a la prensa la restauración morfológica y paisajística de la cantera, que, una vez cerrados algunos flecos aún pendientes con la administración, se abrirá al público para que se puedan depositar restos de obras. La cantera de Santa Bárbara ha sido muy polémica tanto por su clausura, en el comienzo de la década de los 90, y por los posteriores intentos por reanudar la actividad. El Ayuntamiento de Santa Eulària decretó el 28 de agosto de 1991 la clausura de esta explotación por carecer de las licencias municipales de movimiento de tierra, apertura y actividad.
Posteriormente los decretos de alcaldía fueron declarados válidos jurídicamente en una sentencia de febrero de 19995 dictada por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ). Tres años después el juzgado de instrucción número 4 de Eivissa ordenó de nuevo el precinto de la instalación, después de que Readimix Asland, propietaria de la explotación, rompiera el que había colocado previamente el Ayuntamiento. Reciclajes y Derribos Santa Bárbara S.A. lleva dos años tramitando los permisos para restaurar la cantera. Para ello, el proyecto prevé el depósito del material en capas, así como la instalación de drenaje y unos elementos de contención a causa de la pendiente del terreno. Una vez completada la capacidad de almacenamiento de la cuenca de la cantera se revegetará por encima con especies autóctonas a fin de que recupere su estado original, previo al inicio de la excavación y explotación del terreno.
Este proyecto dará solución, por un lado, al problema de la falta de lugares en la isla para verter escombros de construcción limpios de residuos y, por otro, servirá para regenerar una cantera muy polémica y con un impacto visual muy fuerte. Una vez superados todos los trámites administrativos, la empresa iniciará la actividad con un estricto control sobre el material que se deposita. Se abonará una tasa que variará en función del peso que se deposite.