Esta gimnasia fue inventada por Joseph Pilates durante su cautiverio en la Primera Guerra Mundial, momento en el que desarrolló la totalidad de su método y creó la base en la que se inspiran los aparatos existentes en el mercado actualmente. El método se fundamenta sobre los siguientes principios: control para evitar lesiones, precisión, flexibilidad, fluidez (los movimientos no deben ser ni muy rápidos ni muy lentos), respiración y control mental porque la mente es indivisible del cuerpo. Con este método se pueden llegar a realizar unos 300 ejercicios con sus correspondientes variantes, la mayoría de los cuales se desarrollan en una superficie acondicionada para evitar presiones sobre músculos y articulaciones. El principal objetivo de esta gimnasia es fortalecer el centro de gravedad del organismo (Pilates lo llamaba Powerhouse), que se encuentra en la zona abdominal y lumbar.
María José Real