Muebles viejos, estructuras metálicas de todo tipo y 50 bolsas grandes de basura de 135 litros. Este es el material que han recogido en los últimos días los operarios de la empresa concesionaria del servicio de limpieza del Ayuntamiento de Eivissa en el acantilado de sa Penya, en una intervención muy complicada en la que ha sido necesaria una pequeña barca para retirar los residuos por mar.
La operación ha durado dos semanas, en las que los trabajadores de Cespa han eliminado la basura dejándola caer sobre la pequeña playa situada debajo. Allí los operarios encargados de esta tarea han introducido los desperdicios en bolsas de basura para subirlas a la barca y así trasladarlas hasta la playa de Talamanca, donde ayer los camiones de Cespa las recogían para llevarlas hasta el vertedero. Según informan desde el consistorio, la limpieza se intentó hacer mediante una grúa, cosa que resultó imposible, lo que obligó a montar el dispositivo por mar.
El concejal de Medio Ambiente, Joan Rubio, explica que estas limpiezas se suelen hacer una vez al año, debido a que algunos ciudadanos utilizan el acantilado de sa Penya como vertedero ilegal. «Incluso a veces nos encontramos con que tiran vallas del Ayuntamiento de Eivissa que instalamos cuando hacemos obras en la zona», apunta Rubio, que insiste en que el consistorio lleva a cabo una campaña de concienciación continua en este barrio para que los ciudadanos sean más respetuosos y aprendan a tirar la basura a los contenedores. «La concienciación va más allá de los trípticos, es un trabajo de información que lleva a cabo día a día mucho personal del ayuntamiento, como policías o celadores, que les recuerdan donde tienen que tirar la basura», señala Rubio, que añade que el barrio de sa Penya se limpia de forma más frecuente que otras zonas de la ciudad. «Le damos un tratamiento diferenciado».
Pese a que ahora se ha limpiado el acantilado, se prevé darle un repaso de cara a la temporada estival si se detecta un aumento importante de la suciedad en la zona.
La empresa concesionaria Cespa suele limpiar periódicamente algunos puntos de la ciudad que se convierten en auténticos vertederos improvisados. Algunos de los lugares más habituales son Ses Feixes del Prat de Vila o solares sin edificar, que muchos desaprensivos suelen aprovechar para depositar la basura y otro tipo de residuos que no se pueden tirar en los contenedores, como electrodomésticos viejos y desechos de obras. C. R.