Las pelucas a lo afro y las enormes gafas estilo años 70 fueron el viernes, una vez más, las grandes triunfadoras de la fiesta Flower Power de Sant Josep, a la que acudieron cientos de personas con ganas de bailar los éxitos de aquellos años. La celebración no defraudó. De nuevo fueron muchos los que agudizaron el ingenio y los que pasaron horas cosiendo flores en sus disfraces. Pelucas enormes, largas melenas, faldas floreadas y estampados imposibles fueron rescatados del armario una vez más, aunque de forma distinta. Porque pocos repiten atuendo en dos fiestas. Las pelucas se intercambian entre amigos y en los días previos son muchos los que acuden al mercadillo de Sant Jordi para adquirir prendas de lo más hortera.
La Flower Power de este año incluía una novedad, que consistía en la creación de dos ambientes. En la plaza hubo cuatro disc jockeys: Ben, Pato, Javi Box y Miquel Botja. Mientras tanto, en el interior del jardín del Racó Verd se desarrollaba un concierto en el que participaron Blues Dave y Miquel, Denis & Cía.
La decoración del pueblo, que lucía un enorme cartel de Flower Power, incluía grandes flores, medallones y motivos psicodélicos. Sobre la iglesia se proyectaron diferentes imágenes que contribuyeron a crear aspecto de guateque setentero. Lo que menos gustó fue la gran cantidad de humo que se tiró desde el escenario para dar más ambiente a la plaza del pueblo. «Este humo molesta mucho y además las fotos me están saliendo fatal», criticaba uno de los asistentes, que, al igual que muchos otros, había acudido a la fiesta armado de cámara de fotos para inmortalizar el evento.
Aunque el humo sólo fue un mal menor que muchos combatieron con la ingesta de cervezas y copas en vaso de plástico que se vendían en los alrededores. Los más hambrientos también pudieron disfrutar de los deliciosos bocadillos de lomo y de salchichas que se venden cada año con motivo de las fiestas patronales.
C. R.