PP y PSOE avivaron ayer sus diferencias sobre el Estatut en la recta final de la negociación para aprobar el texto estatutario. La vicepresidenta del Govern, Rosa Estaràs, pidió al secretario general socialista, Francesc Antich, que no se «recree en la diferencia ni en la discrepancia». Estaràs contestaba así unas declaraciones de Antich, quien advirtió al PP que los socialistas no apoyarán la reforma del Estatut si no se introducen enmiendas consensuadas. «Hay más diferencias que puntos de unión entre el PP y el PSOE en la reforma del Estatut», dijo Antich, quien cree que una hora de audiencia con Matas para aclarar las diferencias no será suficiente para despejar las incógnitas sobre el texto. «Matas debería hacerse menos fotos», pidió Antich en rueda de prensa celebrada junto a la portavoz parlamentaria, Francina Armengol. Entre otras reivindicaciones, los socialistas creen que el Estatut debe definir las competencias de los consells y las del Govern. «Matas está condenando a que esta Comunidad sea de segunda categoría impulsado por la estrategia electoral de Rajoy y, por esta razón, le digo que este Estatut tiene que ser aprobado desde Baleares», acusó Antich.
Horas después de conocer el alcance de las declaraciones de Antich, Estaràs reiteró que el PP está dispuesto a celebrar las reuniones que hagan falta para alcanzar un acuerdo con el resto partidos. En este sentido, Estaràs apuntó que el PP va a presentar una enmienda para modiicar el plazo en el que Balears debe recibir los 3.000 millones correspondientes a déficit histórico. El PP pide que se abone en 6 años frente a los 10 que propone el PSOE. En materia de financiación, según Estaràs, la propuesta del PSOE es «una fotocopia» del Estatut de Catalunya. «Pido al PSIB y al resto de fuerzas políticas que tengan gestos de voluntad y capacidad de diálogo para llegar a un consenso porque este tiene que ser un estatuto de todos», dijo Estarás. Matas tiene previsto reunirse con Antich para cerrar un acuerdo sobre el Estatut.